La primera parada del viaje de Jesús Calleja y Pablo Chiapella en México fue nadar con el impresionante tiburón ballena, el pez más grande del mundo: puede medir hasta 18 metros y pesar 20 toneladas.
Para poder verlo de frente, Calleja y Chiapella tienen que tirarse delante de él justo cuando pase. Es muy difícil grabarlo porque el animal rápidamente se escapa. Tuvieron que probar varias veces hasta que salió bien y una de ellas fue bastante accidentada: “Me ha pegado un viaje… (…) Tengo el tobillo ‘esguinzado”, exclamaba Calleja después de que el actor le saltase encima.
Por suerte pudieron continuar y al final consiguieron su objetivo de nadar con el tiburón. Al salir del agua, Chiapella estaba eufórico: “¡Justo cuando he caído ha abierto la boca y le he visto de frente! Lo más bestia que he visto en animal vivo, cara a cara. ¡Qué feliz soy!”
Pero, como en todos los océanos, se encontraron con un invitado indeseado: el plástico. El actor sacó un trozo de este material que el tiburón estaba a punto de comerse. “Esto se lo he quitado de la boca. Parece nada, pero le tiene que hacer polvo uno tras otro”. Calleja está de acuerdo: “Esto se queda dentro y se va atascando en los intestinos y los animales se mueren. El plástico tenemos que tomárnoslo en serio. Todo empieza en casa, reciclando”.