Cataluña se suma a las comunidades que le dicen ‘adiós’ a los móviles, durante las horas lectivas, con la vuelta al cole. Según informa Marina Pérez, esta prohibición se extenderá a los descansos, excursiones y extraescolares en el caso de Primaria. En Educación Secundaria, será cada centro el que tendrá que elegir las restricciones y en Bachiller, los alumnos solo podrán usarlo en actividades de aprendizaje. Y es que lo que comenzó como una iniciativa de los padres, ha acabado aprobado por la mayoría de colegios e institutos en la comunidad.
Los teléfonos se quedarán en casa o en la mochila con el inicio del curso en Cataluña. “No se puede utilizar en Infantil y Primaria. En Secundaria solo será para usos educativos”, afirma Salvador Illa, presidente de la Generalitat. En este último caso, serán los docentes los que decidan en qué momento la tecnología podrá utilizarse para el aprendizaje.
Después de tres meses de verano, los estudiantes vuelven a las clases para comenzar su nuevo curso escolar. Y la principal novedad en Cataluña está en los móviles, ya que los alumnos no los podrán usar. “Tenemos que dejar de utilizar tanta pantalla y que no sean tan sedentarios delante de una pantalla, que se muevan más y salgan más, que conecten con el resto de sus amigos", sostiene Sandra Lodeiro, directora Colegio Salvador Dalí, Figueres.
Esta propuesta, que surgió como una solicitud de un grupo de padres, ha terminado en una normativa que defienden la mayoría de los 5.500 centros educativos catalanes. Aunque los alumnos serán los que más tarden en acostumbrarse. “Se ha dejado de lado otras formas de aprendizaje por lo a mano que tenemos la tecnología”, asegura una madre. Ahora, tendrán que esperar a salir del instituto y del colegio para volver a estar conectados a las pantallas.
Un total de 1.610.346 alumnos empezarán el curso escolar 2024-2025 entre este lunes 9 de septiembre y el jueves 12. Según la Consellería, la previsión de este curso es de 249.904 alumnos matriculados en Infantil (frente a los 259.639 del pasado curso, es decir, son 9.735 menos); 447.699 en Primaria (4.313 menos, ya que en el pasado curso eran 452.012); y 342.074 en ESO (4.421 menos ante los 346.495 del curso pasado).
En cuanto a Bachiller, los datos aumentan con 10.910 alumnos más: 111.220 estudiantes frente a los 100.310 del curso pasado. En la Formación Profesional, cuentan con 154.890 alumnos (3.706 más que el curso anterior, cuando eran 151.184). Todos ellos concienciados de que, para aprender en el colegio, tendrán que dejar a un lado las pantallas.
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