Daniel Sancho, condenado a cadena perpetua en Tailandia por el asesinato premeditado del colombiano Edwin Arrieta, ha sido trasladado a la prisión de Surat Thani un día después de conocer su sentencia. En este centro convivirá con otros presos condenados también a cadena perpetua. Antes de que se produzca este traslado, Daniel ha recibido la visita de sus padres. Mientras, en Pontevedra, han vandalizado el busto dedicado a su abuelo: el actor Sancho Gracia.
Desde su detención el pasado 7 de agosto, Daniel Sancho ha permanecido en prisión preventiva en la prisión de Koh Samui, uno de los centros penitenciarios más amables del país, donde los reclusos no tienen delitos de sangre y sus condenas no superan los 15 años.
Ahora, una vez que la justicia tailandesa ha dictado la sentencia de cadena perpetua, Daniel ha sido trasladado a otra prisión. En un primer momento se apuntó a que podría pasar el resto de sus días en Bang Kwang en Bangkok, conocida 'el Gran Tigre', una de las cárceles más peligrosas del mundo, donde todos los reclusos están condenados por delitos de sangre y donde las condiciones son terroríficas: hacinamiento, falta de agua potable, escasez de comida, ratas y cucarachas en celdas para 5 personas en las que duermen hasta 20.
Pero finalmente, su destino es la prisión Surat Thani, a donde será trasladado en un furgón blindado de modo inmediato y de manera confidencial. Esta cárcel se encuentra a 120 km de Koh Samui, en la Península de Malawa, al sur de Tailandia.
Aunque es menos peligrosa que la de Bang Kwang, las condiciones también son extremadamente duras. En esta cárcel todos los reos cumplen condenas por delitos muy graves de sangre, y muchos de ellos están condenados a pena de muerte.
La prisión cuenta con 5400 prisioneros, más del doble de su capacidad. En cada celda conviven unos 20 presos, se duerme en el suelo y Daniel tendrá que pasar más de 12 horas al día sin salir de su habitáculo, con escasez de agua y comida. Además, debido al alto volumen de condenados, las visitas de su familia estarán muy limitadas.
El actor español Rodolfo Sancho ha visitado este viernes a su hijo en la prisión de Samui, acompañado de parte de su equipo legal en España, los criminólogos Ramón Chipirrás y Carmen Balfagón. Por su parte, Silvia Bronchalo, madre de Daniel Sancho, acudió el jueves a ver a su hijo tras el fallo, ya que la prisión de Samui está situada en una zona tranquila de la isla cercana al tribunal.
Mientras, en la localidad pontevedresa de Mondáriz han tenido que retirar el busto del actor Sancho Gracia, tras haber sido vandalizado. La escultura del abuelo de Daniel Sancho ha amanecido manchada de pintura roja tras conocerse la condena de su nieto. Esta mañana lo han retirado para limpiarlo y volverlo a colocar. El actor que dio vida a Curro Jiménez tiene este busto allí porque solía pasar los veranos en el Balneario.
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