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Los cuatro guardias civiles -que sobrevivieron al ataque de la narcolancha en Barbate- declaran ante el juez. Esta vez lo hacen en la causa que investiga la responsabilidad de los altos mandos que ordenaron ese operativo que acabó con un herido grave y dos asesinados. Según informa Denébola Fernández, todos han manifestado que la actuación no fue la correcta, que los medios fueron improvisados y que era imposible escapar.
Es la segunda vez que declaran los cuatro guardias supervivientes del ataque con una narcolancha en Barbate. Lo hacen tras la denuncia de los sindicatos para pedir responsabilidades en la cadena de mando. Durante toda la mañana, varios familiares y asociaciones han acudido para apoyarlos y pedirle al juez que llamen a los altos cargos que dieron la orden de actuar sin tener los medios necesarios.
Las mujeres de los cuatro agentes de la Guardia Civil, que han acudido a declarar ante el juez, señalan que ellos se sienten “muy abandonados” por la institución. Algunas de ellas se han presentado en las puertas del juzgado de Instrucción número 1 de Barbate para apoyar a los supervivientes. Silva Mera, esposa de uno de los agentes que resultó herido, destaca que están muy disgustados y “nerviosos por enfrentarse a sus manos y no verse respaldados por ellos”.
“Ellos han estado siempre a sus órdenes, sacrificándolo todo en una unidad en la que siempre están disponibles, se aprovechan de la condición de ellos, de que siempre están disponibles para lo que sea. Con un hilo ellos te hacen un traje porque se adaptan a todo. Y ese día se aprovecharon de esas condiciones y salieron a un trabajo que no deberían haber realizado”, indica Silva Mera sobre esta causa centrada en los altos mandos.
Mónica Rubiales, mujer de otro de los supervivientes, asegura que el agente “no puede dejar de pensar en lo que pasó ese día”. “Eso lo tienen ellos clavado en su mente”, añade. Desde la asociación ‘Nuestro corazón por bandera’ solicitan al juez que los altos mandos que ordenaron el operativo se les llame a declarar.
La presidenta de la organización, Ysandra Fernández, asegura que todas se vieron reflejadas en los hechos porque podría haberle pasado a cualquiera. “Espero que sienten en el banquillo a los que tienen que estar sentados y que den sus explicaciones de por qué hicieron el operativo ese día en las condiciones en las que los mandaron y que se esclarezca todo”, explica Rubiales sobre el caso de Barbate.
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