La Organización Mundial de la Salud (OMS) afirma que los adolescentes consumen cada vez menos cannabis, pero más cigarrillos electrónicos. Según informa Lidia Camón en Noticias Cuatro, la moda de los cigarrillos electrónicos está llegando a los adolescentes, los consumen incluso más que los cigarrillos tradicionales. Más del 32% de los adolescentes de 15 años lo han probado alguna vez. Contrasta con el 25% que ha probado un cigarrillo normal.
En relación con el consumo de cannabis, baja hasta un 12% en 2023, cifra que mejora el 14% de 2022. Lo que se mantiene como la droga más consumida es el alcohol, ya que más de la mitad (57%) de los adolescentes de 15 años lo han probado alguna vez y el 9% de ellos se han emborrachado al menos dos veces en su vida.
Los datos pertenecen al estudio ‘Health Behavior in School-age Children’ (HSBC) y muestran que del 57% que han probado el alcohol el 56% son niños y el 59% niñas. Además, el 36% de los niños y el 38% de las niñas lo han consumido en los últimos 30 días.
Desde la OMS aseguran: “Estos hallazgos resaltan cuán disponible y normalizado está el alcohol, lo que muestra la necesidad urgente de mejores medidas políticas para proteger a los niños y jóvenes de los daños causados por el alcohol”. Los patrones demuestran que la embriaguez en los 30 últimos días aumenta con el paso de los años, pasa de un 5% en jóvenes de 13 años a un 15% de los de 15.
El 20% de los encuestados asegura haber consumido un cigarrillo electrónico en los últimos 30 días, mientras que el 15% confirma haber probado uno convencional. El incremento también se observa a partir de los jóvenes de 13 años, el 11% confirma haber fumado algún cigarrillo alguna vez, mientras que el 16% asegura haber consumido uno electrónico.
También el 5% de los adolescentes de 13 años ha fumado un cigarrillo en los últimos 30 días, en comparación con el 9% que ha consumido uno electrónico. La OMS alerta; “Esta transición a los cigarrillos electrónicos como una opción más popular que los cigarrillos convencionales exige intervenciones específicas para abordar este problema de salud pública emergente”.
El estudio también comprueba que hay una modificación en los patrones de consumo de drogas entre los adolescentes. Normalmente, el consumo de drogas era más frecuente entre los jóvenes que entre las jóvenes, pero la situación está cambiando. Ahora a los 15 años las adolescentes llegan a superar a los chicos, como en el consumo de alcohol y en los cigarrillos electrónicos.
La OMS destaca: “El cierre de las brechas históricas de género en el uso de sustancias, especialmente entre los adolescentes mayores, exige el desarrollo de estrategias de prevención que sean sensibles a las experiencias y necesidades únicas de niños y niñas. Las intervenciones que tengan en cuenta estas dinámicas en evolución son cruciales para una prevención eficaz”.