La familia de Dolev Yehoud, uno de los rehenes de Hamás, sigue esperando su regreso desde que fue secuestrado hace cuatro meses. “El último mensaje que le pudo mandar a mi hija fue a las 08:22 horas. Desde entonces, han pasado 124 días y no tenemos ninguna señal de vida”, lamenta Marcelo Garzón, su suegro. Yehoud no llegó a conocer a su cuarta hija. Según la Oficina del Primer ministro israelí, quedan 135 rehenes en Gaza en manos del grupo islamista Hamás y otras milicias.
Su mujer Sigal estaba embarazada de 38 semanas cuando ocurrió el secuestro. Ella consiguió evitar ser capturada tras encerrarse, junto a sus hijos, en el refugio antibombas de su domicilio. “Encerrada sin comida, sin bebida y haciendo sus necesidades dentro mientras escuchaban cómo los terroristas entraban en su casa y lo rompían todo”, explica el suegro. Los familiares de los rehenes israelíes se han reunido hoy con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para demandar que los prisioneros sean liberados.
La vida de Dolev Yehoud, de 35 años, cambió el siete de octubre de 2023. El día de su secuestro se encontraba en el Kibutz Nir Oz con su hermano Arbel Yehoud. Él es ingeniero y voluntario en la Cruz Roja y, durante años, se ha dedicado a tratar ataques al corazón de los vecinos del Kibutz.
Dos semanas después de este fatídico día, Yehoud se convirtió en padre de su cuarta hija llamada Dor. “Significa ‘Generación’ en español. Se lo puso mi hija sola porque mi yerno ya estaba secuestrado", dice Marcelo Garzón. La pequeña ya tiene cuatro meses y todavía no ha podido conocer a su padre. “Lo único que nos queda es la esperanza”, sostiene el padre de Sigal. Mientras tanto, Hamás ha propuesto un plan de alto el fuego en Gaza compuesto en tres fases de 45 días, cada una durante cuatro meses y medio hasta poner fin a la guerra. Por su parte, Israel ha rechazado esta opción.