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La historia de Olga González Conde ha indignado a gran parte de la sociedad. La madrileña lleva años viviendo en Inglaterra y fue maltratada cruelmente durante años por su exmarido. A día de hoy, Olga desea volver a España con sus tres hijos de la mano, pero se encuentra atrapada por la legislación británica, que no deja que sus hijos salgan del país, según informa Raquel Duva en el video.
La española de 46 años lleva una gran temporada residiendo en Leeds, lugar donde ha criado a sus tres hijos de entre 12 y 15 años. Durante su matrimonio con el padre de sus hijos, de nacionalidad pakistaní, fue víctima de violencia de género y maltrato. Olga llegó a estar ingresada en centros sanitarios por lesiones y la última vez que su exmarido quiso agredirle fue con un martillo. Afortunadamente, el agresor se encuentra actualmente bajo prisión en Inglaterra.
El problema ha llegado cuando Olga ha intentado volver a España con sus hijos y mantenerse alejada de su agresor los máximos kilómetros posibles. Los menores tienen el pasaporte caducado y para su renovación necesitan la firma de los progenitores. Es decir, se necesita la autorización y el consentimiento del agresor para salir del país. La víctima ha pedido ayuda al consulado en Manchester, pero de momento no es posible. También ha viajado a Londres para hablar con la embajada, donde no ha obtenido ningún tipo de noticia esperanzadora.
La española también ha pedido protección a las autoridades británicas. De nuevo, se lo denegaron: "Me dijeron que me volviera a mi casa, y yo les he dicho: 'pues que venga un guardia a vivir a mi casa', y me dijeron que no", comenta Olga al equipo de Noticias Cuatro. La víctima se siente totalmente desamparada: "Me han estado llamando dos, tres veces, preguntándome si tenía una clase de papeles, pero ya no se han ocupado de mi".
El caso de Olga ha indignado a un gran número de personas, como al Padre Teodoro, perteneciente de la Congregación Fe y Esperanza. Este ha viajado a Gran Bretaña para ayudar a la familia, pero aun así, parece imposible. El padre nos manifiesta su desagrado con la situación: "Fijaros el poder que tiene un maltratador cuando casi mata a esta mujer que ha estado ingresada dos días con parte de lesiones. Encima, ensañamiento hacia sus hijos".
Las circunstancias que rodean el caso de Olga choca con la justicia española. En el momento, se encuentra en vigor la Ley 40/2006, de 14 de diciembre, del Estatuto de la Ciudadanía Española en el Exterior. El artículo 26.3 del Título II declara lo siguiente: "Los poderes públicos desarrollarán medidas dirigidas a facilitar la protección y el retorno de las españolas residentes en el exterior, y, en su caso, sus hijos, víctimas de situaciones de violencia de género cuando el país de residencia no ampare de manera suficiente a las víctimas de estos delitos".
Por ahora, habrá que esperar a nuevas noticias de las autoridades británicas. Mientras, una familia víctima de violencia de género se encuentra desesperada por volver a su hogar.
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