Nicolás Maduro celebraba este sábado los dos meses de las elecciones cuyo triunfo sólo se atribuyó él. Mientras tanto, el candidato reconocido como vencedor de los comicios por una treintena de países, entre ellos España, Edmundo González, apareció en la Puerta del Sol de Madrid arropado por varios líderes del PP.
González no habló, pero sí lo hizo Maduro desde Caracas. El venezolano, tras lanzar su artillería contra Josep Borrell hace cuestión de un mes, no tuvo pelos en la lengua para calificar de "fascista" a Isabel Díaz Ayuso y llamar "ladrón" a Alberto Núñez Feijóo, de quien añadió que "está vinculado al narcotráfico en Galicia".
A miles de kilómetros, también este sábado, tenía lugar el primer baño de masas de Edmundo González en la capital española. Candidato ganador en el exilio, no pronunció ni una sola palabra sobre el escenario, ni siquiera un saludo.
Dos meses después de la cita electoral seguimos sin ver las actas, pero Maduro se atrinchera y asegura que jurará el cargo como presidente de Venezuela el próximo 10 de enero. La oposición, debilitada, pide ayuda en las calles.
La comunidad internacional presiona por un lado pero, por otro, continúa comprando petróleo a Venezuela. De hecho, las importaciones de crudo venezolano se han duplicado en Estados Unidos, también en España.
"El petróleo es realmente la tabla de salvación del régimen", asegura Anna Ayuso, investigadora de CIDOB, un centro de investigación en relaciones internacionales. El economista José Carlos Díez apunta que "el 80 o el 90% de los ingresos públicos del Estado y de Maduro proceden del petróleo".
Donald Trump impuso sanciones al crudo venezolano en 2019, pero todo cambió tres años después. Ante la falta del mismo que provocó la invasión de Rusia en Ucrania, Joe Biden eliminó las sanciones a la nación caribeña.
El gigante estadounidense Chevron sigue extrayendo petróleo en Venezuela a día de hoy, al igual que la española Repsol. Washington continúa renovándoles las licencias mientras que la oposición a Maduro solicita que sean suspendidas.
De momento, en Estados Unidos nada se va a mover hasta el 5 de noviembre, hasta saber quién será el próximo inquilino de la Casa Blanca. Un tiempo que corre a favor del régimen de Caracas.
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.