Conmoción en Reino Unido por el triple crimen de la mujer y las dos hijas de John Hunt, un famoso comentarista de la BBC. Según informa Daniel Postico en Noticias Cuatro, un exmilitar de 26 años, Kyle Clifford, ha utilizado una ballesta para cometer los asesinatos. Tras ser detenido, se le ha puesto bajo tratamiento psiquiátrico. La Policía sigue con la investigación y está registrando un domicilio en Enfield, al norte de Londres, que podría ser la residencia del autor de los hechos.
Los agentes dicen que el presunto asesino tuvo fácil acceso a la casa de las víctimas y se cree que podría conocer muy bien a la familia. Algunos vecinos y medios apuntan a que la hija pequeña del comentarista salió durante una temporada con él y que rompió la relación hace una semana, pero no se sabe si con él o con otra persona.
Una parte importante de la investigación policial se basa en imágenes grabadas por cámaras de seguridad, en las que se observa a un hombre caminando por la calle con un objeto que parece un arma tapada con una tela blanca. Se ve cómo entra en un coche y se dirige al domicilio de John Hunt.
La policía cree que Kyle Clifford ató y mató con una ballesta y otras armas a la mujer del comentarista Carol Hunt, de 61 años, y a sus dos hijas Hannah y Louis Hunt, de 28 y 25 años respectivamente. Tras un aviso, la Policía encontró en el domicilio a las tres víctimas heridas de gravedad. Todas murieron posteriormente en el lugar de los hechos.
“Estamos en shock, nuestros pensamientos y oraciones están con la familia de estas tres mujeres. Es horrible lo que ha ocurrido”, dice uno de los vecinos. Según algunos medios británicos, Kyle Clifford fue pareja de una de las jóvenes en el pasado. Después de 24 horas de búsqueda, lograron localizarle herido en el norte de Londres. Le detuvieron como presunto autor del triple asesinato.
Según recoge The Guardian, el servicio de ambulancia de Londres confirmó que un hombre fue tratado en el cementerio de Lavender Hill antes de trasladarlo al hospital. Había un gran número de policías en el cementerio, situado a 16 millas (25,7 kilómetros) de la escena del crimen. El lugar estaba próximo a la vivienda que registró después los agentes para buscar pruebas.
Yvette Cooper, ministra del Interior de Reino Unido, considera urgente la necesidad de revisar una ley -desarrollada en 2021 por su ministerio- para introducir leyes más estrictas sobre las ballestas. Al parecer, las víctimas no estaban atadas cuando llegaron los agentes que acudieron por la llamada de una de ellas, sino que el presunto asesino las torturó y luego las liberó.
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