La situación en Gaza sigue siendo extrema y nos deja imágenes muy duras. Los niños mueren por desnutrición mientras las madres no pueden amamantar a sus bebés. El antes y el después de Rafah es todo un ejemplo de cómo viven los palestinos desde que Israel decidió invadir el territorio. Una situación que se espera que empeore mientras las negociaciones entre Israel y Hamás no avanzan.
“En poco tiempo, hemos visto cómo trece niños han muerto por desnutrición. Las madres también lo están y no pueden amamantar a sus hijos”, lamentan desde uno de los hospitales de Gaza. Los niños están pagando el precio más alto de la guerra y 16 ya han muerto por desnutrición. Se espera que la situación empeore.
La ofensiva israelí está dejando terribles consecuencias en Gaza, sobre todo entre los menores. Los hospitales se llenan de niños que sufren malnutrición por la falta de alimentos. Uno de ellos murió hace dos días y su madre, desolada, cuenta que no tenían acceso ni a comida ni a tratamientos médicos. Los más pequeños comienzan a pesar la mitad que hace dos meses. Una escena que empeora si le sumamos las enfermedades agudizadas por los desplazamientos forzados. Muchos corren desesperados en busca de ayuda.
"Lo que estamos presenciando en Gaza es una matanza masiva de niños y niñas a cámara lenta porque no queda comida y no les llega nada. Están muriendo porque el mundo no les ha protegido, y ahora las familias huyen hacia el próximo objetivo militar de Israel (la ciudad de Rafá, en el sur) para evitar morir de hambre, atrapadas en una trampa mortal", advierte el director de Save the Children para los Territorios Palestinos Ocupados, Jason Lee.
La ayuda internacional no es capaz de paliar la crisis humanitaria de gran magnitud que sacude a Gaza. La situación es tan extrema que los niños agonizan por la malnutrición. “¿Hay algún padre en el mundo que pueda ver a su hijo retorcerse de hambre delante de él y permanecer en silencio?”, cuestiona uno de los padres que va en busca de ayuda y comida. “La gente está muriendo de hambre”, añade otro.
La última ronda para alcanzar un alto al fuego ha finalizado sin avances y sin la presencia de Israel en las negociaciones que se están produciendo en El Cairo. Mientras los ataques israelíes continúan, las familias no encuentran consuelo ante la frustración de ver a sus hijos apagándose poco a poco por el hambre.