La familia de Alexéi Navalni exige que su cuerpo sea entregado inmediatamente

Este fin de semana crece -y atemoriza aún más- una figura siniestra, la del presidente ruso Vladimir Putin por la muerte del opositor Alexéi Navalni el viernes en la prisión más remota que hay en Rusia, en pleno Círculo Polar Ártico. Hasta allí ha llegado la madre del disidente, Liudmila Naválnaya, tras una noche de detenciones a manifestantes.

La mujer ha llegado a la prisión IK-3, junto a su abogado. Kira Yarmish, portavoz y colaboradora habitual del dirigente opositor ruso Alexéi Navalni, ha exigido que el cuerpo del opositor "sea entregado a su familia de inmediato". Ha asegurado que la madre de Navalni y su abogado "han llegado al depósito de cadáveres de Salejard", han llamado a las instalaciones y los trabajadores aseguran que allí se encuentran los restos mortales de Naval.

Investigan la muerte de Alexéi Navalni

Aún se desconoce la causa de la muerte del más tenaz de los opositores de Putin. Tan solo se sabe que se desvaneció durante un paseo y poco después falleció. Mientras las autoridades rusas investigan las causas de su muerte, desde Occidente y Estados Unidos solo encuentran a un único culpable, el presidente ruso Vladimir Putin.

A Navalni ya intentaron matarlo hace cuatro años con veneno. Cuando se recuperó en Alemania y regresó a Rusia lo condenaron a 30 años de cárcel. Pasó casi 300 días en régimen de aislamiento, su salud empeoró y el pasado diciembre lo trasladaron a una de las prisiones más duras de Rusia en el Círculo Polar Ártico, donde ha muerto.Sin embargo, en su última aparición parecía tener buen estado de salud. Durante una vista judicial, incluso bromeaba con el juez.

El opositor dejó claro a sus seguidores cuál era su deseo en caso de que los matasen: “Mi mensaje en caso de que me maten es muy simple, no se rindan”.

El sábado por la mañana, en Moscú, unos pocos han desafiado de nuevo al autoritarismo del Kremlin y han improvisado pequeños altares en homenaje a Navalni junto al Muro del Dolor.

Los homenajes se han sucedido en varias ciudades rusas y hay decenas de detenidos. De ser vinculados con la organización de Navalni, podrían ser juzgados por delitos equivalentes a terrorismo.