Ha ocurrido una nueva erupción en Islandia, ya es la tercera en dos meses y ocurrió tras un terremoto de baja intensidad en la localidad de Grindavík al suroeste del país, según informa la Oficina Meteorológica de Islandia (IMO). Las autoridades afirman que la erupción ha creado una fisura de aproximadamente tres kilómetros muy cerca de la que se formó a mediados de diciembre en la misma zona. La fisura se extiende hacia el norte y el sur, mientras la lava ha comenzado a fluir hacia el oeste.
Por el momento no se considera que exista una amenaza inminente para la población de Grindavík, que cuenta con unos 4.000 habitantes. Ya en noviembre, como consecuencia de la actividad sísmica, las autoridades declararon la situación de emergencia por una próxima erupción y tuvieron que desalojar la población.
La primera erupción ocurrió el 18 de diciembre y finalizó cuatro días después. Tras ello se permitió la vuelta de los habitantes a sus casas, salvo a los que cuyas casas hubieran sido dañadas por el terremoto. La segunda explosión no tuvo lugar hasta el 14 de enero y duró tan sólo dos días. Esta última erupción ocurrió en el mismo lugar que la primera. El país suele sufrir erupciones volcánicas cada cinco años aproximadamente.
Ari Trausti Gudmundsson, un geofísico islandés, aseguró que es poco probable que la lava alcance al municipio de Grindavík, pero en función de la cantidad de lava expulsada, puede ser una posible amenaza para la carretera que comunica con la localidad, para la central eléctrica y para la Laguna Azul. Este último lugar es un balneario que es reconocido por ser una de las principales atracciones turísticas del país. Por el momento han decidido cerrar sus instalaciones.
Islandia es un país que tiene unos 360.000 habitantes a lo largo de un área de 103.000 kilómetros cuadrados. Está situada en la dorsal mesoatlántica, por lo que es un país con una inmensa actividad geológica y volcánica, un factor que influye de manera determinante en el paisaje del territorio. Cabe destacar que el país se encuentra sobre un punto caliente, lo que supone que se acumule magma debajo de la corteza terrestre. La isla cuenta con más de 200 volcanes, de aquí que su origen sea debido a la intensa actividad volcánica.