En un nuevo capítulo de la trama Koldo han visto la luz unos mensajes que el ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, habría intercambiado con el exasesor de José Luis Ábalos, Koldo García, respecto a un contrato de mascarillas del Gobierno de Canarias durante la pandemia. De los mensajes de WhatsApp, publicados por el diario El Mundo se desprende que Víctor de Aldama recurrió a Koldo para que presionara al entonces presidente de Canarias, para que se pagaran unas cantidades de dinero que se debían.
El Mundo ha publicado la conversación mantenida por WhatsApp entre Torres, durante su etapa como presidente canario y García, quien le reclamaba al actual ministro el pago de un contrato que, según este diario, corresponde a la compra de mascarillas a la empresa Soluciones de Gestión, investigada en el caso Koldo y para la que trabajaba el empresario y presunto comisionista Víctor de Aldama.
Según la investigación, la empresa Soluciones de Gestión, de Víctor de Aldama, habría recibido 12 millones de euros en contratos, pero había un pago de 4 millones de euros que no se había realizado y Aldama habría recurrido a Koldo García para que presione a Ángel Víctor Torres, que entonces era presidente de Canarias, para intentar que se produzcan esos pagos.
Según estos mensajes, parece que Koldo García hacía de intermediario de las empresas de Aldama. El asesor de Ábalos lo ha negado y afirma que el realizaba una labor filantrópica, que no había dinero de por medio y que lo que intentaba era que una empresa que había realizado una labor para la administración cobrase. Lo que dice Víctor de Aldama, en cambio, es que el asesor le estaría mandando estos mensajes con el ministro para acreditar que estaba haciendo algún trabajo en su favor.
En cualquier caso, la conversación de ese WhatsApp no refleja irregularidades del actual ministro, no refleja que haya habido un cobro, no refleja nada más allá de una gestión entre bambalinas para ver si se cobra o no una cuestión de una administración, lo cual, podría parecer completamente natural si no hubiera dinero de por medio. Hay que recordar que Aldama dice que Koldo le pide 50.000 euros para él, pero no hay pruebas de que se produzca ese pago ni pruebas de que ese dinero que recibiría supuestamente Koldo acabara en manos del ministro.
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