El PSOE ha denunciado una agresión al exalcalde de Ponferrada y portavoz socialista en el ayuntamiento en plena calle y a su salida de la sede del partido en la ciudad leonesa. Olegario Ramón fue atacado por manifestantes de ultraderecha a plena luz del día. Los agresores, banderas españolas en mano, le estaban esperando a la salida de una reunión y le zarandearon hasta que logró zafarse. Dos personas han sido detenidas y puestas en libertad tras prestar declaración.
En los vídeos difundidos por el PSOE de Ponferrada, se puede ver como los agresores, que portaban banderas de España, han agredido a Olegario Ramón, propinándole varias patadas y puñetazos, mientras no paraban de insultarle.
El exalclade de Ponferrada salía de una reunión con alcaldes socialistas cuando los individuos de ultraderecha la emprendieron a golpes con él, a las puertas de la sede de su partido. Asegura que vio odio en sus caras y tuvo miedo, "me dio un manotazo, me tiró el móvil y cuando fui a recogerlo aprovechó y me dio varias patadas, además de insultarme y amenazarme". Olegario considera que esto forma parte de "una estrategia de crispación".
La Delegación del Gobierno en Castilla y León ha informado de que un varón de 67 años, cuya identidad no ha sido facilitada, ha sido detenido como presunto autor de la agresión y añade que la investigación continúa abierta.
Los agresores llevan semanas apostados frente a la sede del PSOE y ya han sido denunciados e identificados. Se trata de simpatizantes de Vox y el líder del partido en Castilla y León, Juan García-Gallardo, se ha desmarcado de la agresión. "La violencia contra el adversario político no debe ser la respuesta”, afirma, “oposición, toda, violencia, cero".
Por su parte, el presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha condenado la acción, "quiero expresar mi más firme condena ante este acto de violencia. Te envío todo mi apoyo y afecto".
No es la primera vez que el PSOE de Ponferrada recibe algún tipo de agresión. Hace cuatro meses la sede del partido apareció cubierta de sangre de animal. Entonces se responsabilizó a las concentraciones de la ultraderecha que no paran desde el año pasado.