El empresario Juan Carlos Cueto, considerado como cerebro del caso Koldo, ha declarado ante el juez de la Audiencia Nacional, Ismael Moreno. Cueto es el responsable de la compañía adjudicataria de los contratos de las mascarillas con las que supuestamente se llevó 9,6 millones de euros. Una investigación de Hacienda sirvió a la UCO para apuntalar el caso sin ser detectada.
Alegando que todo fue legal y que su trabajo fue casi altruista, el empresario solo ha respondido las preguntas de su abogado. Cueto ha señalado que el margen de beneficios fue razonable: en torno al 13%. Muy distinto al que destaca la Fiscalía con un 33%.
El empresario Juan Carlos Cueto ha declarado durante 30 minutos en la Audiencia Nacional. Cueto se ha limitado a decir que todo fue legal, que la operación estuvo auditada y que el margen de beneficios fue ajustado y razonable, en torno al 13%. Unos argumentos que el juez Ismael Moreno no comparte demasiado, ya que lo considera uno de los principales cerebros de la trama.
“Los investigados pueden solo declarar a sus abogados y pueden dar su versión. En ninguna de ellas ha reconocido ninguna explicación más allá de haber hecho una actuación altruista en defensa de la vida de los españoles y que tenían poco margen de beneficio económico. Pero creo que hay que verlo más profundamente”, explica Marta Castro, coordinadora jurídica de Vox.
La Audiencia Nacional ha prohibido salir de España al empresario por su relación con la trama de las mascarillas. El titular del Juzgado Central de Instrucción Número 2 ha adoptado esta decisión en línea con lo solicitado por la Fiscalía Anticorrupción, una petición a la que se han adherido las acusaciones populares del PP y Vox y a la que no se ha opuesto la defensa de Cueto.
El Ministerio Público sitúa a Cueto como la "persona que realmente controla la sociedad Soluciones de Gestión, integrada en el grupo Cueto", aunque figurase como propiedad de otro de los investigados, el empresario vasco Íñigo Rotaeche. Anticorrupción detalla en su querella "el liderazgo que Cueto" ejerce sobre el grupo que lleva su apellido, "siendo el responsable último de las decisiones concernientes a este grupo empresarial".
La Fiscalía ha dejado claro que existió "una relación directa y estrecha" entre el exasesor y exescolta del exministro José Luis Ábalos, Koldo García, y el propio Cueto, "que no se circunscribe únicamente a la adjudicación de los contratos". El Ministerio Público ha asegurado que Koldo era la persona que usaban para “agilizar” los trámites con el Ministerio de Transportes en la contratación de mascarillas durante la pandemia. Cueto ha remitido a un informe elaborado por la consultora KPGMG en 2021 que concluiría que los precios de venta de mascarillas fueron acordes al mercado.
Anticorrupción detalla en su querella "el liderazgo que Cueto" ejerce sobre el grupo que lleva su apellido, "siendo el responsable último de las decisiones concernientes a este grupo empresarial". Los principales investigados, añaden, daban novedades y pedían permiso a Cueto "para la ejecución de préstamos y toma de decisiones".