Lunes negro en las bolsas mundiales. La fatídica jornada en los mercados empezaba con la bolsa de Tokio desplomándose un 12%, la mayor caída del índice Nikkei 225 desde 1987. En España, el IBEX-35 ha caído un 2’3%, su mayor caída desde marzo de 2023. La bolsa de Nueva York también ha replicado las caídas. Según explica Rebeca Gimeno en Noticias Cuatro, este nerviosismo extremo se debe al temor entre los inversores de que la mayor debilidad de la economía estadounidense desemboque en recesión.
Las bolsas mundiales han vivido una jornada de locura. Se ha registrado una venta masiva de acciones que se ha extendido desde Asia al resto de los mercados internacionales.
En Wall Street, el conocido como indicador del miedo, que mide la volatibilidad de la bolsa americana, ha registrado una subida vertical hasta su nivel más alto desde la pandemia. Solo lo hemos visto reaccionar así en una ocasión: en la crisis de Lehman Brothers en 2008.
Según cuenta Rebeca Gimeno, hay factores técnicos de trasvase de carteras a nivel global, necesidad de hacer caja y vender, que explican lo sucedido. Además, está el factor americano, “hasta hace tres días la narrativa era: los tipos de interés en Estados Unidos están muy altos pero la economía va a evitar caer en recesión y hoy ya no parece tan claro. Eso ha alimentado el miedo de los inversores”.
De este modo, el índice de referencia de la Bolsa de Tokio ha despedido la primera sesión de la semana en los 31.458,42 enteros, lo que implica una caída del 19,5% en las tres últimas jornadas hábiles, incluyendo una bajada del 5,8% en la sesión del pasado viernes.
El resto de los principales mercados asiáticos también registraba caídas significativas en la sesión ante el temor de un debilitamiento mayor de lo esperado de la economía estadounidense tras conocer la semana pasada el enfriamiento del mercado laboral de EE.UU. lo que habría llevado a los inversores a reposicionarse ante la posibilidad de una Fed más agresiva en su respuesta monetaria.
El Ibex 35 ha cerrado con una caída del 2,34% este lunes negro bursátil, registrando así su mayor descenso desde mediados de marzo de 2023, cuando la crisis bancaria de Estados Unidos hizo tambalear los mercados de todo el mundo.
Además, ha retrocedido a mínimos desde marzo de 2024, al situarse al cierre en los 10.423,4 enteros, en una jornada marcada, en primer lugar, por el desplome del 12,40% que ha registrado el índice Nikkei de Japón; y en segundo lugar por las dudas que han generado los últimos datos macroeconómicos que se han publicado en Estados Unidos.
Esta situación ha provocado que Wall Street haya abierto con fuertes caídas que se mantenían en el momento del cierre bursátil en Europa ante el temor a una recesión en el país norteamericano.
Así, el Dow Jones perdía un 2,17%; el S&P500, un 2,37%; y el Nasdaq, un 2,78%. Mientras, en Europa, los descensos también han estado en línea con el que ha registrado el Ibex 35, con caídas del 1,42% en París, del 1,82% en Fráncfort, del 2,04% en Londres y del 2,27% en Milán.
Según informa en Noticias Cuatro Edgar Costa, el miedo, que se propaga rápidamente en los mercados, viene propiciado por varias cuestiones, una de ellas es el dato de desempleo que en este mes de junio se sitúa por encima del 4% y el miedo a que la reserva federal corte los tipos de interés. Los expertos hablan de que nos adentramos en una posible recesión en Estados Unidos en 2025.
Las empresas que más están acusado en este momento la caída son las tecnológicas, esto podría ser una primera señal de una corrección de unos títulos que han subido mucho, sobre todo cualquier tecnológica que esté relacionada con la inteligencia artificial. Este lunes, el mayo fabricante de chips del mundo, la coreana TSMC ha caído casi un 10% y esto podría ser una señal de ese pinchazo de la burbuja en las tecnológicas, tenemos ese miedo a la recesión en EEUU y el epicentro de todo este terremoto se sitúa en Japón porque muchos fondos habían pedido dinero en yenes, porque la moneda estaba barata, y ahora el yen ha subido y las empresas han empezado a deshacer posiciones para obtener liquidez y todo esto ha seguido arrastrando a las bolsas