Un ciberataque roba los datos de los usuarios de la Thermomix y en ‘Todo es mentira’ nos preguntamos qué datos puede tener este conocido robot de cocina de nosotros, cómo los consigue y cómo podemos evitar posibles fraudes. Para ello, cuenta con la experiencia de Javier Sanz, experto en ciberseguridad.
¿Cómo es posible que cocinando nos roben nuestros datos?, le pregunta Marta Flich a Sanz, a lo que responde que hay que tener en cuenta que, cuando adquirimos algunos de estos electrodomésticos, nos solemos registrar en la web o aplicación de dicho aparato electrónico: "Las empresas nos quieren tener muy controladitos y, en el momento en el que te registras para poder utilizar tu Thermomix en su recetario eso ya forma parte de una base de datos y los ciberdelincuentes saben que los datos personales valen mucho dinero".
"Habrán encontrado alguna vulnerabilidad o habrán tenido o alguien habrá tenido que tocar donde no tenía que tocar y se han filtrado todos los datos personales de la gente que tiene una Thermomix: nombres, direcciones... hasta las preferencias culinarias de cada uno de ellos", añade Sanz. Pero, ¿para qué quieren las empresas estos datos? "Normalmente, estos datos se venden luego en la internet profunda, tienen un valor y se utilizan para cometer fraudes, cometer ciberestafas, suplantar la identidad, también se venden para que otras empresas te llenen el correo electrónico de publicidad", responde Javier.
"El fin siempre es económico, pero, el problema de todo esto es que es una filtración tras otra y hay datos que coinciden con otros datos de una compañía de seguros, de una compañía eléctrica y los malos ya saben todo absolutamente de nosotros, ese es el principal problema", cuenta Sanz, que nos recuerda que cualquier electrodoméstico que requiera del uso de internet puede sufrir este ataque. Por ello advierte tomar precauciones con las contraseñas.
"No podemos tener la misma contraseña para todos los servicios. La gente que estaba registrada en la web de Thermomix, de las recetas, debería cambiar la contraseña por precaución, si la tiene repetida en otros servicios", aconseja Sanz, que nos cuenta, además, que las empresas deberían reforzar sus sistemas de seguridad. "Lo que podemos hacer es tomar precauciones y sospechar mucho porque sabemos que los ciberdelincuentes tienen nuestro nombre, dirección, teléfono, y ahora es más fácil que nos puedan engañar mediante ingeniería social".