Un comentario, un pensamiento político, un físico… Son muchas los detalles que te pueden hacer conectar con una persona y también son muchos los que pueden hacerte pensar eso de “¿Qué hago yo aquí?” en una primera cita. La gran mayoría de los solteros que visitan ‘First Dates’ deciden quedarse hasta el final para averiguar que tenía preparado para ellos el destino, pero hay otros que lo tienen más que claro y salen corriendo sin mirar atrás.
Dicen que el tema del amor está cada vez más complicado, pero la esperanza nunca se pierde y puede que si la chispa no ha surgido en el primer plato puede que surja en el postre. Sin embargo, ya se sabe que el amor no es una ciencia exacta y que hay ocasiones en las que dos personas son incompatibles y punto.
Sí, si eres seguidor de ‘First Dates’ has visto como hay solteros que deciden dejar su cita a medias e irse por donde han venido porque tienen más que claro que esa persona no es la que estaban buscando. Eso sí, a su cita y a nosotros nos suelen dejar ojipláticos cuando hacen algo así.
Un platón es un platón cualquier día del año, pero si es en televisión parece que duele un poquito más, por no hablar de si es en la tele y el día de San Valentín. Pero una cosa te decimos, si te dejan plantado, ellos se lo pierden.
Aunque los platones más sonados que hemos vivido en ‘First Dates’ se suelen producir durante la cena al escuchar algo que no te gusta de la otra persona, también los hemos tenido antes de intercambiar palabra. Recordamos el caso de Natalia, una joven que quería enamorarse y que no llegó a ver la cara del soltero que habían seleccionado para ella. El joven se asomó disimuladamente por la puerta, vio algo que no le gustó y desapareció.
Y aunque luego te toque pedir perdón, como sucedió en el caso de José María con Rocío, hay veces que es mejor decir las cosas claras y cumplir el refrán de más vale una vez colorado que ciento amarillo. Eso sí, con educación y sin hacer sentirse mal a la otra persona.
Mejor eso que pasarte toda la cita diciéndole a la otra persona que no te gusta nada.
En ‘First Dates’ hemos visto muchos tipos de plantones:
El clásico plantón por el físico que no da una oportunidad al interior de las personas que vimos cuando María no quiso cenar con Paco.
O el de Julia que lo intentó pero no fue capaz de ver más allá del parecido de su cita con un cura y terminó espantada.
Pero también hemos visto como se derrumbaban auténticos mitos tras unos minutos de conversación. ¿Os acordáis del platón de Magnus a Platania?
Y es que hay parejas que no pegan ni con pegamento. Alexis dejó plantada a Bárbara antes del postre porque no hablaba su mismo idioma en el tema de nutricional y animal. Mientras que a Sonia se le metió en la cabeza que Jorge era muy mayor para ella cuando tan solo tenía un año más.
Pero quizás, lo más duro es darte cuenta cómo le pasó a Pilar que el hombre que pensabas que podía ser tú príncipe azul te hiciera pronunciar la frase "Se puede extinguir la raza humana que no volvería a tener una cita con él".