Anika, una cocinera gaditana de 56 años, es la siguiente en pasar por 'First Dates' para ver si consigue reactivar la chispa del amor en su corazón. Es gitana "por los cuatro costados" y prefirió estar "15 años o más" sin mantener relaciones por cuidar a su difunta madre. Nuestra soltera busca una persona que sea buena y que la haga compañía.
De hecho, Anika recuerda lo sola que se siente cuando está en su casa y, muy emocionada, lo cuenta a las cámaras de 'First Dates': "Es muy triste estar en casa sola tantas horas y sin poder hablar con nadie. Yo le hablo a mi perro y cualquier día me contesta".
Sonia, una administrativa de 54 años será la cita de Anika. Es una persona generosa y a la que no le gustan las complicaciones. En cuanto se saludan, a nuestra soltera le parece "muy mona". "Me llama mucho la atención sus ojos, porque tiene una mirada muy profunda", cuenta Anika.
"No es mi tipo de chica en la que yo me hubiese fijado, pero si me ha llamado la atención por su porte", desvela Sonia sobre cómo le ha parecido Anika. Carlos Sobera las interrumpe momentáneamente para acompañarlas a su mesa y de comienzo a su cita.
Una vez que se encuentran cenando, tanto Anika y Sonia parecen conectar. Tienen los mismos gustos y aficiones, les encanta viajar y ambas son personas muy comprometidas para cuidar a sus respectivas madres.
Sonia pregunta a Anika con qué edad salió del armario. Nuestra soltera admite que ya salió desde que nació. "Cuando tuve uso de razón, lo dije y eso es lo que había". Además, también cuenta que viene de familia gitana y no ha tenido problemas con sus preferencias. En cambio, Sonia admite que salió del armario hace relativamente poco. "Me enteré por un primo mío que mi abuelo, que era del que menos sospechaba, era gitano. Y mi abuela, por los apellidos, también. Entonces, tardé mucho en salir del armario con 45 años y he tardado mucho, todavía más, en saber que era media gitana", afirma a las cámaras del programa.
Sonia parece que ha encontrado en Anika todo lo que estaba buscando. Una mujer muy cariñosa y graciosa: "Me ha dado la sensación de que con ella no es que me vaya a reír una vez al día, sino que voy a estar todo el tiempo riéndome porque me hace muchísima gracia: Para mí, eso es muy importante".
En cuanto terminan la cena y se dirigen a al reservado de 'First Dates', ambas se ponen a bailar sevillanas y se divierten como nunca. "La he visto una chavala simpática, muy agradable, muy sonriente. Me ha gustado", cuenta Anika a las cámaras.
Tanto Sonia como Anika se lo han pasado en grande. Han conseguido conectar y parece que la chispa del amor ha despertado entre ellas. En cuanto les preguntan si quieren mantener una segunda cita, las dos han aceptado "verse en Jerez" las veces que haga falta para seguir profundizando una relación que puede ser maravillosa.