Cristina es una persona extrovertida, pero necesita tener su espacio. Es italiana, pero vive en Santiago de Compostela dónde llegó en 2005. Es camarera, pero le gustan mucho las artes escénicas y hace teatro. En el amor, tuvo una relación por la que se quedó en España. No ha tenido muchas parejas estables porque sentía que tenían la mentalidad un poco machista. Le gustaría que su cita de ‘First Dates’ sea un hombre que, sobre todo, la respete.
Mario, su cita, tiene la sensación de que es buena persona y que nunca se enfada. Ha estado 24 años con el amor de su vida, pero una enfermedad se cruzó en su camino y se terminó todo. Vive en Madrid y le ha contado a Cristina que se dedica a la jardinería. A ella le ha llamado la atención su profesión y a él, el físico de Cristina “es una mujer bonita”.
La cena ha comenzado con Mario interesándose por el motivo que trajo a Cristina a España. Ella le ha contado que vino por amor y que ha estado muchos años con el padre de sus hijos. Él no tiene hijos, pero le ha hablado de su esposa, la cual falleció hace tres años. A Mario no le supone ningún problema que Cristina sea madre porque a él le gustan los niños y sus amigos dicen que es el soltero más divertido.
El soltero se ha interesado por las aficiones de su cita y Cristina le ha dicho que le gustaba mucho actuar, cantar, leer, salir a cenar, el deporte al aire libre… Aficiones que a él le han parecido muy interesante. Ella ha querido saber cuánto tiempo llevaba de jardinero y le ha dicho que había hecho varias veces voluntariado ambiental, pero que las plantas no se le daban muy bien.
Cristina le ha confesado que estaba muy bien con él porque sentía que podía hablar de muchas cosas. Mario seguía muy nervioso, pero también se sentía cómodo. A ninguno de los dos les importaría tener una relación a distancia, pero Cristina no estaba sintiendo la atracción física que necesitaba para comenzar algo. Han coincidido en que ambos habían nacido un día 7 y que no les gustaba nada Mecano, pero en poco más.
En el momento de la decisión final, Mario ha dicho que sí a tener una segunda cita para conocerse mejor, pero ella ha sido sincera y le ha dicho que no, que no había sentido lo que esperaba.