Anastasia tiene la sensación de que cuando se define como una chica “superintensa” la gente enciende todas sus alarmas, pero en realidad es que es una chica que hace muchas cosas y siente mucho. A Laura Boado le gusta mucho su nombre y se ha interesado por su origen, y ella le ha contado que es de origen ruso. Le gusta bailar bachata, las exposiciones, jugar al pádel… “un poco de todo”. Tuvo una relación de seis años que terminó en boda “estaba muy loca”. Para ella es muy importante la positividad y le gustaría que su cita fuera un tipo que se cuidara, alto, con bonita sonrisa y con ganas de arriesgar y vivir la vida.
Daniel, su cita, tuvo su época emo y como no soportaba sus rizos, se planchaba el pelo todos los días. Le gusta mucho hacer deporte. Al verle, a Anastasia le ha gustado mucho su sonrisa y le han llamado la atención sus dilataciones. Él también ha visto a una chica muy atractiva y muy dentro de sus gustos.
Anastasia ha querido saber a qué se dedicaba su cita y él le ha contado que era autónomo y que tenía una empresa de reformas con su mejor amigo. Ella se dedica al marketing digital y está centrada en el sector del pádel. Daniel hace tiempo que no lo practica, pero no descarta jugar algún partido con ella.
En el tema de relaciones, Daniel le ha contado que era de relaciones largas, que la última que tuvo era una relación abierta y que no repetiría. Anastasia le ha contado que llevaba un año divorciada y él se ha sorprendido, pero no se ha asustado. Ella ha querido saber desde cuándo llevaba las dilataciones y se ha reído al saber que ambos había sido emos “yo también llevaba dilataciones”.
El soltero le ha dicho que su principal hobbie era el deporte y a ella le ha encantado porque el 80% de su tiempo lo pasaba haciendo deporte. La soltera no es mucho de salir de fiesta, pero sí le gusta salir a bailar bachata, algo que Daniel odiaba, pero que ahora no descarta aprender. Han alucinado al saber que Daniel era alérgico al alcohol y ella al alcohol destilado “han juntado a dos raritos”.
En el reservado, les ha tocado darse un beso húmedo y a Anastasia no le hubiera importado que se lo diera, pero Daniel se ha puesto muy nervioso y no se ha lanzado a la piscina. Han comenzado a bailar bachata y aunque el soltero lo ha intentado, ella ha tenido claro que necesitaba unas clases urgentemente.
A la hora de la verdad, Anastasia le ha confesado que ella le hubiera besado y ha querido saber si la veía para algo más que para hablar. A Daniel le han salido los colores y le ha dicho que por supuesto, pero que le había dado muchísima vergüenza. Parece que entre ellos ha surgido algo especial que no ha hecho más que comenzar.