Matías Roure: así es el lado más íntimo del camarero de 'First Dates'

Hay muchas personas que no quieren dejar que sea el destino quien les lleve hasta el amor de su vida y prefieren hacerse cargo de su situación y buscar ellos mismos a quien pueda convertirse en su media naranja

Una cita a ciegas puede ser el comienzo de todo y eso es lo que se plantea desde First Dates, que lleva ocho años intentando que sus participantes encuentren el amor en su restaurante. Es el mismo tiempo que lleva Matías Roure tras la barra del programa, convertido en uno de sus rostros más conocidos. 

Así es Matías Roure, camarero de 'First Dates'

Matías nunca ha pasado desapercibido para la audiencia del programa, desde un primer momento llamó la atención de los presentes, que querían saber más de este hombre rubio y fuerte que espera a las citas tras la barra, preparando cócteles, su especialidad, pero también sirviendo cervezas. 

Nacido en Córdoba (Argentina) en 1986, vino a España siendo muy joven, en busca de un trabajo y escapando de la inseguridad y la incertidumbre de su país. Aterrizó en Alicante, donde tenía familia. Allí comenzó trabajando como portero de discoteca, una profesión que también había ejercido en su ciudad natal. Poco a poco fue realizando más labores, desde camarero a coctelero, relaciones públicas y hasta gogó en alguna ocasión

Tras un tiempo junto al mar, decidió mudarse a Madrid, donde continuó trabajando tras la barra hasta que fichó por First Dates. Al principio de esta aventura, y no demasiado convencido de que fuera a durar, lo compaginó con un trabajo de entrenador personal, que consiguió gracias a sus conocimientos deportivos, otra de sus pasiones junto con viajar. Lo dejó cuando vio el éxito del programa. 

"Era un poco mi faceta más desconocida. Por las mañanas seguía entrenando, haciendo mis ejercicios porque era mi cable a tierra, lo que a mí me ayudaba a desconectar, a desvincularme de la realidad y disfrutar como un niño", explicaba hace tiempo en una entrevista para 20 Minutos. “Lo de entrenador me gustaba porque disfrutaba ayudando a la gente a buscar la forma de comer sano, hacer ejercicio… pero es una profesión que al final tienes que estar para dedicarle tiempo al cliente. No obstante, es una pasión que siempre está y va a estar ahí”.

En First Dates presume de su habilidad tras la barra y encandila a la audiencia con su forma de ser, pero también a algunos de los participantes, aunque nunca ha ido más allá. "Reconozco que ha habido chicas que me han parecido muy guapas, aunque nunca he quedado con ninguna. El único amor allí ha sido la maravillosa relación que viví con Lidia", destacó en una entrevista para Diez Minutos. El argentino se refiere a Lidia Torrent, hija de Elsa Anka y con quien mantuvo una relación durante años. 

La historia de amor de Lidia Torrent y Matías Roure

Lidia y Matías se conocieron en 2016, cuando ambos comenzaron a formar parte del staff de Frist Dates y, aunque al principio no se llevaban del todo bien, las cosas cambiaron y comenzaron una relación en 2017. Dos años después, y tras convertirse en una de las parejas del momento, optaban por tomar caminos separados. 

Ambos confirmaban su ruptura a través de las redes sociales, “Hay caminos que se cruzan y otros que se separan, nuestra historia fue bonita Lidia Torrent. Gracias. Sé feliz”, escribía Matías. "Te quema el ego, no el desamor. La hipocresía en el amor aparece cuando uno no quiere perder aquello que no está dispuesto a cuidar", era el duro mensaje de Lidia. 

A pesar de ello, amos mantuvieron la cordialidad y el buen ambiente en el trabajo, tal y como explicó el propio Matías ante las cámaras de Europa Press: "A pesar de la relación que tuvimos somos compañeros de trabajo, somos familia, somos amigos y lo bueno que le pase tanto a ella como a mí, a mis compañeros de trabajo, me pasa a mí. O sea, lo disfruto". Lidia dejó el programa en 2022, tras convertirse en madre de una niña, nacida fruto de su relación con el exfutbolista Jaime Astrain. 

Matías no parece haber vuelto a encontrar el amor, por lo menos no se ha confirmado ninguna relación oficial desde que finalizó la que mantuvo con Torrent. "Estoy enamorado de la vida, siempre, siempre... Pero bien, muy feliz, feliz y contento con el viaje que estoy disfrutando", reveló en la misma entrevista.

El barman ha pasado muchos años tras la barra, pero ha dejado ver solo unos retazos del hombre que verdaderamente es, aunque poco a poco se le ha podido conocer un poco más, siempre dispuesto a calmar los nervios de los participantes y a cuidar a sus compañeros de trabajo, con quienes ha forjado bonitos vínculos y casi considera familia.