Hassan es un tipo muy ambicioso al que le gusta mucho luchar por lo que quiere y que lleva tatuado en el brazo el lema “lucha o muere”. Ha venido con el pañuelo palestino echado sobre los hombres y le ha contado a Laura Boado que es de Siria, pero que lleva siete años en España. Ha viajado por el mundo entero, pero se ha enamorado de Sevilla “me llaman el sirio de mi alma”. En su país tuvo que dejar a su familia por la guerra, pero ahora están en Turquía. Trabaja en un hotel que ayuda a los refugiados “sigo luchando por proteger los derechos humanos y dar a la gente”. De su cita en ‘First Dates’ espera que sea una chica deportista como él.
Lis, su cita, es enfermera, nació en Santo Domingo y vino a España a hacer un máster de urgencias y emergencias. Le gustan que los hombres sean “hombres de verdad, fuerte, extrovertido, que no tenga miedo”. Al verla, la cara de Hassan se ha iluminado con una gran sonrisa porque ha visto a una chica muy guapa. Ella ha tenido la sensación de que su cita no era español y ha intentado adivinar su lugar de origen, pero no ha llegado a adivinar que era de Siria.
La soltera le ha contado que llevaba siete años en España y nos ha confesado que de Siria no sabía nada más que había tenido muchos conflictos bélicos. Eso sí, Hassan le había parecido un chico muy atractivo nada más verlo.
Lis ha comenzado la cena interesándose por la religión de su cita y Hassan le ha contado que era musulmán, pero que se podía casar son alguien de otra religión y que en Siria también era el año 2024 “igual que en todo el mundo”. Sin embargo, ella le ha dicho que no era así porque tenía amigos iraníes que le decían que en su país vivían en el 1800. Hassan ha sentido que igual se referían al año lunar y le ha comenzado a hablar de dichas teorías y del origen del islam.
El soltero no come carne de cerdo y ha querido saber si comía humus y falafel, pero ella no lo había probado y le ha dicho que en India eran muy distintos. Lis le ha contado que le gustaba mucho la cultura árabe, pero cuando él ha querido que le dijera qué le gustaba concretamente, ella no ha sabido responderle “no sabe más que eso”. Lis nunca ha estado en Sevilla y a Hassan no le ha gustado mucho porque él ama su ciudad. Hassan le ha contado como vivió el bombardeo de su ciudad, que sentía que no sabía cuando iba a morir, y que sacó a su mamá y a su hermana del país.
Hassan le ha contado que hablaba tres idiomas y que aprendió el castellano con mucha rapidez. Ella no habla idiomas y el soltero ha sentido que era una chica con pocas ambiciones, que no iba a ser compatible con él “no me ha gustado, le hace falta mundo, no es para mí”.
En el momento de la decisión final, Lis le ha dicho que sí quería conocerle más porque le parecía muy atractivo y con una historia de vida apasionante. Él le ha dicho que no quería repetir porque sentía que la faltaba mundo y que tenía que viajar más sola, y conocer otras culturas. Un comentario ante el que Lis no se ha quedado callada “no conoces mi historia, me considero una mujer fuerte y valiente, no todo el mundo se viene de su país sola”.
Hassan se ha quedado mudo porque le acababan de callar la boca y con mucha razón. Le ha dicho que intentaría que no le volviera a suceder, pero Lis no le ha dejado terminar y le ha deseado que conociera a una mujer que le hiciera feliz.