Rafa ha venido a la fiesta de graduación de ‘First Dates’ con ganas de pasárselo bien, conocer a alguien y conocer la energía que se siente cuando te enamoras. Le encanta el deporte y sobre todo, practica artes marciales. Lleva dos años y le gustaría que su cita fuera una chica de hábitos saludables y que se cuide igual que él.
Paola, su cita, se imagina su boda en una pequeña iglesia, con su familia y el novio llorando “eso sí, la boda tiene que ser en Sevilla, no hay otra opción”. Al verle, Rafa ha visto a una chica muy guapa y un poco nerviosa “eso es que viene buscando algo serio”. A Paola le ha parecido fundamental que Rafa también fuera sevillano porque le gusta mucho el acento de su ciudad “he conocido a niños de Murcia y el acento me echa para atrás”.
Los jóvenes han comenzado la cita hablando del motivo por el que Rafa vivía en Madrid, pero ella le ha dejada abierta la posibilidad a dejar Sevilla. La soltera está opositando para ser profesora de primaria, pero no descarta ser profesora de educación física. Para Paola es muy importante que su cita comparta su pasión por la Feria de Abril y la Semana Santa, y Rafa le ha dicho que no se perdía ni una “tienes muy pinta de estar muy guapa vestida de flamenca”.
En mitad de la cena, Carlos Sobera ha dado paso a la banda La La Love You y los solteros han alucinado porque era uno de sus grupos favoritos y les flipaba la canción ‘El fin del mundo’ que estaban interpretando. Paola y Rafa han vivido un momento único y se han mirado a los ojos porque en ese momento podría ser para ellos un momento perfecto.
Paola ha querido saber cuál era la fecha de cumpleaños de Rafa para comprobar si sus horóscopos eran compatibles y él ha alucinado al saber que era Leo “menudo carácter”. El es Acuario, pero le ha explicado que era muy extrovertido y que no tenía nada raro. A Paola le ha gustado mucho porque ella habla un montón con la gente y estaba encantada porque estaba notando mucha conexión.
Hablando del futuro, los dos han hablado de que les gustaría tener hijos y casarse por la iglesia. Estaban muy cómodos juntos y Rafa tenía la sensación de que ambos tenía ganas de conocerse mucho más. A Paola le ha llamado mucho la atención que los dos llevaran la pulsera roja de la suerte y que se las hubieran regalado sus madres. Para Paola, es la pulsera del destino “llevo un tatuaje que pone destino en el pie”.
Rafa ha querido invitar a cenar a su cita y han recibido muy contentos sus diplomas de graduados en el baile del amor. En el momento de la decisión final, Rafa se ha olvidado de la distancia y le ha dicho que sí, que quería ser su rey el baile. Ella también ha encontrado a su rey del baile, aunque haya tenido algún que otro problemilla para coronarle en condiciones “esto no es de mi talla”.