El ‘zasca’ de Mariángel a Bruno en la decisión final: “Tendría una segunda cita, pero no como pareja”

  • Bruno, de 22 años, es crupier. Argentino, ha vivido en cinco países y ahora, en Madrid

  • Mariángel tiene 19 años y es de Venezuela, aunque ahora vive en Madrid, tras ser adoptada por sus tíos

  • First Dates | Programa, en vídeo (23/02/24)

Bruno se considera una persona extrovertida y tiene ganas de encontrar a una chica con la que “se pueda matar de risa” y esté cómodos. Mariángel también está lista para conocer a una nueva ilusión, pero parece que su cita no ha acabado de conquistarla esta noche en ‘First Dates’.

La primera impresión que tiene Bruno de Mariángel es buena y cuenta que le gustó físicamente. Durante la cita, se conocen un poco más hablando de a qué se dedica cada uno: él le explica qué es ser crupier y ella le cuenta que está estudiante inglés y ayudando en la tienda de su madre.

Cuando Bruno se abre con su cita y le cuenta que ha aprendido japonés y ha vivido en el país asiático, a ella le resulta “superinteresante”. Lo que a Mariángel no le convence tanto es que a su cita no le guste bailar, porque a ella le apasiona.

Durante el postre, tantean la posibilidad de tener una segunda cita. Cuando Bruno le pregunta a Mariángel cuál sería su plan ideal, ella le propone ir al cine. En la decisión final, aunque Bruno está dispuesta a seguir conociendo a Mariángel, ella no acaba la frase como al argentino le hubiera gustado: “Yo tendría una segunda cita con Bruno, pero no como pareja”.