Verónica se había perdido y se está encontrando. Trabaja en salones de juegos, pero su pasión es la música y le encantaría intentarlo de forma profesional. Busca a un tipo amable y le da igual el físico del hombre que sea su cita.
Fabio, su cita, es un hombre muy trabajador que siempre está pensando en lograr su objetivo. Al verle, Verónica ha sentido que era muy lindo y ha querido saber por qué tenía acento argentino si le había dicho a Matías que era de Perú, pero él le ha dicho que en Lima hablaban así, pero que había estado también en Roma y que solo llevaba dos meses en Madrid. A él le ha gustado mucho Verónica y la cita ha comenzado con ganas.
Ya sentados en la mesa, Verónica ha sentido que Fabio tenía muchas cosas que ofrecerle y le ha parecido muy interesante que se dedicara al mundo de los negocios. Ella le ha contado que vivía en el centro de Madrid, pero que no tenía muchos amigos porque en su tiempo aquí habían pasado muchas cosas “buenas y malas”. Sin dejar de repetir la palabra “monstruo”, Fabio ha querido saber cuáles habían sido las malas y si tenían relación con un chico, y ella le ha dicho que sí. Su última pareja se rompió hace ocho meses y con ella su afición de cantar junto a él en la iglesia.
Por la forma en la que le brillaban los ojos al hablar de la música, Fabio ha sentido que era su gran pasión y que le gustaría dedicarse a eso, algo que a él le ha gustado mucho. Fabio le ha contado que le gustaba cocinar y que hacía una salsa boloñesa digna de un restaurante, a ella le han entrado ganas de probarla y ha sentido que era estupendo que “no se muriera de hambre”.
Verónica estaba muy intrigada por su acento argentino y él le ha dicho que era totalmente sincero que “las mentiras son una forma de huir de los problemas” y que en Lima todos hablan así. Esa misma frase, ella la ha escuchado muchas veces, pero no le queda otra que confiar.
En el tema sexual, los dos han coincidido en que eran muy activos, pero ella ha querido saber a qué se refería exactamente con ser activo y Fabio le ha explicado que hablaba de la frecuencia. Los dos han tenido ganas de conocerse mejor y ella ha cerrado la cita proponiéndole que le invitara a unos espaguetis boloñesa.