No pasa todas las noches, pero cuando pasa se nota, José Tomás ha sentido como un flecha de Cupido atravesaba su corazón y cientos de mariposas comenzaban a revolotear en su barriga. Sin embargo, esa misma flecha de amor rompía su corazón en pedacitos tan solo unos minutos después, su cita le ha dado calabazas.

Patricia se ha presentado como una mujer “enfadica” en ocasiones porque es una persona inconformista y muy perfeccionista, pero siente que en la mayoría de los casos en una mujer alegre. Le ha contado a Sobera que es de Elche y que es una apasionada del mar y del buceo. Eso sí, cuando bucea solo encuentra peces y está buscando a un amigo que la compense emocional y físicamente.

Por el nombre, Carlos Sobera ha tenido la sensación de que estaba a punto de recibir al torero, pero se trataba de otro José Tomás, un hombre tímido y osado a partes iguales. Al ver a Patricia ha sentido que era una maravilla y han comenzado hablando de sus edades. Ella tiene 38 y él un añito más, y en tan solo unos minutos han descubierto que vivían cerquita y que los dos acaban de comenzar en el mundo de la bachata.

La soltera le ha contado a José Tomás cómo se había adentrado en el mundo de la bachata y parece que ha tenido la sensación de que su cita podría convertirse en su nueva pareja de baile. Respecto al mar, José le ha dicho que él no había buceado nunca, pero que también le gustaba mucho y no le importaría ir con ella a su casita frente al mar. Patricia le ha parado y le ha dicho que eso tenía que ganárselo, pero el soltero iba por el buen camino.

José Tomás le ha contado a Patricia que llevaba desde 2008 sin tener una relación seria y ella le ha confesado que había estado 22 años con el padre de su hijo. Fue una relación que comenzó con 15 años y había sido muy bonita. El soltero no tiene hijos, pero le encantan los niños y los animales de hecho, le ha confesado que le pone de los nervios que le comparen con el torero que lleva su nombre “soy antitaurino”.

Patricia se ha llevado una gran alegría porque había congeniado en muchas cosas y ya solo les faltaba ser el mismo horóscopo. José estaba feliz porque había encontrado todo lo que estaba buscando, el físico, la simpatía… No sabía si estaba despierto o estaba soñando.

En el reservado, Patricia y José Tomás se han quitado la espinita de bailar bachata juntos y aunque lo han hecho fatal y han sentido que les iban a echar de sus respectivas academias, se lo han pasado bien, muy bien. José Tomás estaba feliz, hacía muchos años que no sentía un flechazo así “ha sido un boom, tengo las mariposas en el estómago”.

El soltero no podía estar más feliz y ha dicho que sí tendría una segunda cita con Patricia con una gran sonrisa y la seguridad de que el flechazo había sido mutuo, pero ella no ha sentido lo mismo. Patricia le ha dicho que se lo había pasado fenomenal y que volvería a quedar con él para bailar bachata, pero que no era lo que estaba buscando.

“Me has roto, me he quedado hecho polvo, pensaba que ibas a decir que sí”, ha asegurado un José Tomás hundido y con el corazón roto tan solo unos segundos después de sentir el flechazo de su vida.