Kova se ha enfrentado a su second chance con mucha ilusión y la sensación de que Enrique, su cita, tenía rollazo, pero según iban sirviéndoles platos y se iban conociendo un poquito más, sus ilusiones se han desvanecido. Enrique todavía no ha superado que su novia saliera corriendo a un mes de la boda.
Kova ha querido darle una segunda oportunidad al amor en ‘First Dates’ y ha vuelto a tener una cita en el restaurante. Es “una rockera en vena” a la que le pierde “una fiesta remember de DJ Marta, yo soy una fiestera”. Tuvo una primera cita con el Monje Vidente y no encontraron nada que les uniera. Busca a un rockero al que conocer paso a paso, que le llene y ver qué va surgiendo. Carlos Sobera le ha entregado una pista de su cita y ha alucinado al ver unos anillos muy rockeros que eran muy similares a los que ella llevaba puestos.
Enrique, su cita, es un motero valenciano que tiene clara una cosa “las cosas de montar no se dejan” y quiere encontrar a una mujer a la que cuidar igual que cuida su moto. Al verle, Kova ha sentido que tenía “rollazo”, pero a ella el mundo de las motos le da miedo y no se ve dentro de ningún club ni subida a una Harley.
Aunque Kova y Enrique parecían tener un rollo parecido, siempre hay un pero. Él le ha contado que tuvo que dejar de trabajar en un bar porque le han operado del corazón y ella ha sentido que su cita “muy ágil no está, las cosas como son”, cree que no se cuida demasiado. Algo que él también ha pensado de ella porque le hubiera gustado que su cita fuera una mujer más delgada.
Enrique le ha contado a Kova que estuvo a punto de casarse, pero que un mes antes de la boda su prometida se largó del piso con 6.000€ y las alianzas. Un detallito que le hace cerrarse un poco al amor. Kova ha tenido la sensación de que era un buen tipo y le habían hecho mucho daño “como todo hasta el hueso todo es magro”. Ella estaba sintiendo que tenían cosas en común, pero él tenía claro que la cita no iba a ningún sitio “no me gusta, no me atrae físicamente”.
Kova ha querido saber cuál era la ideología política de Enrique antes de terminar la cita y se ha dado cuenta de que tampoco congeniaban en eso. Él es de derechas y a ella las motos le daban miedo, dos motivos más que suficientes para justificar que ninguno de los dos querían volver a tener una cita juntos. Se han caído bien, se lo ha pasado bien, pero Cupido ha fallado la flecha.