Todo comienza cuando fallece el padre de Marisol, su madre se muda a la casa de su pareja y su hijo, pero la casa es pequeña. Es entonces cuando la madre de Marisol les dona su casa a ella y a su entonces marido, una casa más grande por cero euros. Tras 27 años, el matrimonio se termina y acuerdan dividir la vivienda en dos mitades, además, firman una clausula que ninguno de ellos podrá seguir viviendo en esa casa con otra pareja.
Tiempo más tarde, Marisol encuentra pareja y se va con ella y su hijo a otra casa, sin embargo, la madre de Marisol continua viviendo en la vivienda. Por este motivo, el hombre recurre a la justicia para echar a la madre de Marisol, pero la justicia le ha denegado la petición y este hombre deberá continuar viviendo muy cerca de su exsuegra. Tras estos problemas, la hija de Marisol tiene miedo de que su hijo no pueda heredar la casa de su familia.
Para conocer todos los detalles de este extraño caso, 'En boca de todos' hablaba con la hija de Marisol y exmujer del afectado, que comenzaba comentando: "Puedo entender el malestar de mi exmarido, pero es lo que firmamos en su momento".
En referencia a cómo fue el divorcio con el que era su marido, Marisol explicaba: "Fue problemático, él solamente me decía que no iba a vivir en casa de su madre, porque antes se iba debajo de un puente. Por este motivo, como la casa era grande, decidimos dividir la casa, la parte más grande para mi madre, mi hijo y yo y la otra parque más pequeña, solo para él".
Por último, respecto a la relación de su exmarido con su madre, Marisol afirmaba: "No se llevan bien, es normal, cuando has ido tres veces a un juzgado porque te quieren echar de tu casa. Mi madre tiene 88 años y solo le he pedido que respete la casa como está y el día que no esté, la vendemos o llegamos a un acuerdo, yo sé que la casa es de los dos al 50%".