Un menor ha sufrido una supuesta agresión sexual en el colegio por parte de un compañero. Desde que esto ha pasado, no ha acudido al centro de nuevo por miedo. Su madre ha solicitado al colegio, que separen a su hijo y a su presunto abusador en aulas diferentes.
Leticia Santos, reportera de ‘En boca de todos’ se encuentra con la madre para que nos cuente los detalles de este desagradable caso. Esta madre comienza relatando cómo se da cuenta: “Al llegar mi hijo a casa fue al baño y cuando le limpié vi que el papel higiénico tenía una mancha de sangre”.
En un primer momento, la madre pregunta a su hijo qué ha ocurrido y aunque al principio no le dice nada, finalmente, le cuenta lo ocurrido. Al parecer, el niño le dice a otro niño que le pica el culo, este le dice que seguro que tiene una hormiga y que él le ayuda a quitársela. Acto seguido los dos entran al baño, el amigo le pide que se quite los pantalones, el niño accede y en ese momento, le mete un lápiz por el ano.
Al darse cuenta de lo ocurrido, la madre acude inmediatamente con su hijo a un centro de salud y el informe determina que se aprecia una pequeña herida perianal.
Los hechos se los cuenta al colegio, pero el centro le asegura que no pueden hacer nada, porque el supuesto agresor no reconoce los hechos, y realizan un informe en el que dicen: “Se informa que el expediente se ha cerrado ya que una vez recopilados todos lo testimonios no hay pruebas concluyentes”.
El principal problema para esta madre y que señala como culpable al colegio, es que la vigilancia por parte del centro no ha sido suficiente, ya que asegura, que si su hijo y el otro menor hubieran estado vigilados, nunca habría ocurrido esta agresión.