Anna Marín es una joven de 21 años de Elche que ha desaparecido y cuya última pista la ubica en Perú. La Asociación SOS desaparecidos ha alertado la desaparición de la joven que fue vista por última vez el pasado 28 de agosto en la ciudad alicantina.
Según informa la asociación, se trata de un caso de alta vulnerabilidad ya que todo apunta a que podría haber sido captada por una secta. Anna Marín Sánchez nunca había dado problemas a su familia. Es una joven normal que siempre ha vivido en la más absoluta normalidad. Cursa 4º de Historia en la universidad y tiene un círculo reducido de amigos. Sin embargo, esta chica de Elche llevaría desde noviembre con una doble vida.
En julio la joven se va de viaje una semana a Perú por primera vez y le comenta a su familia que es un viaje de la universidad. Al retornar a principios de agosto, sus familiares empiezan a notarla rara y semanas más tarde, el 29 de agosto, se va "al campo con unas amigas", según lo que le cuenta a sus padres. La joven y su familia mantienen el contacto por WhatsApp durante su escapada y el día que se esperaba su retorno a Elche, le comunica a su familia que se queda en Madrid ya que ha encontrado trabajo.
En ese momento su entorno comienza a sospechar y cuando vuelven a tener contacto con Anna, esta les dice que está en Lima, Perú, y que hay una nota de despedida en la mesilla. Según lee la nota, la joven dice que está bien y que se ha ido por voluntad propia.
Después de que la familia denunciase, descubren que Anna dejó la universidad el pasado noviembre, a pesar de que ella sigue supuestamente yendo a clase todas las tardes. La organización subraya que creen que se trata de una secta pseudo religiosa, e investigan si la ha captado un miembro aislado o la propia secta.