Los incendios forestales han provocado una auténtica catástrofe medioambiental este verano en España. Se han quemado miles de hectáreas, miles de personas han tenido que ser desalojadas de sus casas y han dejado, además, 58 heridos y dos fallecidos. El origen del 70% de los fuegos es desconocido, pero se sabe que al menos el 7% son provocados. Por esa causa se ha detenido a 20 personas. Pero ¿cómo se identifica a los presuntos culpables? La sargento Gema Armero, del SEPRONA, nos lo cuenta en ‘En boca de todos’.
“Son delitos muy complicados de investigar por el lugar en el que se producen. No hay testigos, están en zonas aisladas y no suele haber cámaras de vigilancia. Demostrar la autoría de un delito forestal es complicado”, explica la sargento.
Para identificar a los pirómanos, los cuerpos de seguridad deben acudir lo antes posible a la zona donde se originó el incendio “para preservar los indicios” y así poder “determinar la causa y la autoría”. Aun así, nos ha explicado que es muy difícil “vincular esa causa con el autor” por lo que es necesario recoger “el mayor número de evidencias físicas” y hablar con los posibles testigos.
Las penas que les pueden caer a los pirómanos pueden ser desde un año de prisión y llegar hasta los 20 si se les declara culpable de incendio forestal. Si se trata de una imprudencia, las penas oscilan entre los seis y los nueve meses. Las negligencias más habituales están relacionadas con el trabajo agrícola, “sobre todo con el uso de maquinaria que implica chispas”, ha explicado Armero.