Sharara Sarwari vive en primera persona el horror que supone ser mujer en Afganistan con los talibanes en el poder. Esta ciclista afgana no se atreve a salir a entrenar a la calle y solo puede pedalear en el patio de su casa junto a su hermano. Los deportes están prohibidos para las mujeres en Afganistan y Sharara Sarwari ha visto como no podrá, por ahora, hacer su sueño realidad.
Esta ciclista afgana solo puede coger su bicicleta aquí, entre las cuatro paredes su casa. El ciclismo y cualquier otro deporte están prohibidos para las mujeres en Afganistán. Los talibanes le quitaron su bicicleta, el derecho a practicar deporte y su sueño de competir a nivel internacional.
Ahora, recorre el patio con la bicicleta de su hermano, sin atreverse a salir a la calle. "Desde el día en que el los talibanes llegaron al poder, todos mis sueños se han reducido a cero. Y no tengo ninguna esperanza de que algún día pueda competir", explica. Uno tras uno van cayendo como fichas de dominó los derechos fundamentales de las mujeres desde que los talibanes tomaron el poder del país el pasado mes de agosto.
Ya no hay clases mixtas en el país y en las calles no hay rastro de ellas. Sharara Sarwari, como otras muchas, piden no caer en el olvido y seguir pedaleando hacia su libertad.