La vida fuera del ring de Mike Tyson siempre ha sido muy loca y esto de cierta forma ha repercutido a su carrera profesional. En la biografía que ha publicado recientemente cuenta muchas anécdotas que ha vivido.
Una de ellas fue la primera derrota que tuvo el 11 de febrero de 1990. Esta suponía terminar con el récord de victorias consecutivas que llevaba. James Douglas fue el encargado de recordarle que bajara al mundo de los mortales y que también se podía fallar en el ring.
"El 8 de enero de 1990 subí a un avión para volar a Tokio. Pateando y gritando. No quería pelear; todo lo que me interesaba en ese entonces era salir de fiesta y tener sexo con mujeres. No consideré a Douglas como un gran desafío. Ni siquiera me molesté en ver ninguna de sus peleas en video. Yo había vencido fácilmente a todos los que lo habían noqueado.
Además de tener sexo con las sirvientas, estaba viendo a esta joven japonesa con la que había tenido relaciones la última vez que estuve en Japón. Robin (la esposa de Tyson) salía de compras y yo bajaba a la parte trasera del hotel donde esta joven tenía una habitación. Así que ese fue mi entrenamiento para el combate con Douglas”, decía Tyson.
La popularidad y el dinero en muchas ocasiones tiene una doble cara y esta era una de ellas. Tyson comenzó por estos derroteros y los escándalos empezaron a formar parte de su día a día. Dejó se ser el boxeo su prioridad para dar paso al alcohol y las drogas. “El día antes de la pelea también tuve dos sirvientas al mismo tiempo. Y luego dos chicas más, una a la vez, la noche previa a la pelea”.
Con estos antecedentes los días previos, se plantó en el ring y claro no dio la talla ante Douglas. Esto no supuso una derrota cualquiera, perdió sus títulos de campeón (AMB, CMB Y FIB). Tras esto se recompuso y cosechó ocho victorias consecutivas para recuperar dos de ellos.
Él ha comentado en muchas ocasiones que todo este tipo de adicciones le llevó al abismo e incluso pasó por la cárcel. Eso ya quedó en el pasado y ha confesado que ya ha logrado superarlas y llegó a afirmar que “la marihuana le ayudó a alejarse de otros vicios”.
Llegó a decir en el podcast Hotboxin que “cuando era joven, era un animal con dinero. Le daba dinero a la gente, a todos, festejaba con todos y tenía sexo con sus madres, sus hermanas y sus primas... orgías. Estaba loco. Estaba tan enfermo Estaba loco. Estaba tan enfermoy no tenía idea de que estaba tan enfermo”. Ahora se ha alejado de todo esto y lo último que le hemos visto hacer es un combate benéfico para recaudar fondos para causas benéficas.