Thibaut Courtois vuelve a olvidarse de su pasado y reivindica su presente en el Real Madrid. El portero belga se enfrentó en los cuartos de la Champions League al Chelsea, club donde militó durante cuatro temporadas (2014-2018).
Thibaut parece que se ha vuelto a olvidar de donde viene y ha besado el escudo ante la mirada de los aficionados blues. El portero vivió durante cuatro años en Stamford Bridge, pero en su vuelta al coliseo del Chelsea no ha dudado en mostrar cuál es el club al que pertenece ahora. En su época con el club londinense consiguió ganar dos Premier League y dos Copas de la Liga.
No es la primera vez que Thibaut se olvida de su pasado, ya le ocurrió con el Atlético de Madrid, en numerosas ocasiones el portero ha hecho desplantes al club colchonero, donde alzó su carrera al fútbol europeo. De hecho, aún sigue latiente la polémica con su placa en el paseo de las leyendas del Metropolitano.
Durante el partido, el portero mostró un gran nivel, a la altura de unos cuartos de final de Champions. En Stamford Bridge se le pudo complicar la noche al Real Madrid al filo del descanso. Cuando ya se pensaba en la pausa y llegar a ella sin daños, el Chelsea explotó una vez más la banda izquierda. La pelota voló de lado a lado del área blanca y cayó a los pies de Cucurella muy cerca del área pequeña.
El belga, en su partido 45 en Champions con el Real Madrid, achicó espacios para no dar oportunidades al lateral y hacerse muy grande, a la par que empequeñecía la portería. Una intervención que, teniendo en cuenta que el resultado era de 0-0 y el partido estaba al borde del descanso, fue trascendental. Un paradón que sirvió al Madrid para estar en semifinales.
Thibaut Courtois es una garantía absoluta, un seguro de vida y un elemento vital en este Real Madrid.