Si eres corredor o quieres empezar a serlo seguro que te ha surgido esta pregunta: ¿Qué es mejor, correr en cinta o por la calle? Hay diferencias y beneficios diferentes que poseen cada una de ellas y te vamos a comentar cuáles son.
Hay muchos factores que interfieren en esta simple práctica en sus dos vertientes
Al final el mecanismo es lo mismo: correr, pero no es lo mismo hacerlo en el asfalto, del tipo que sea, que en la cinta. El entorno natural ya sea por el suelo o porque hace viento nos puede frenar, mientras que en la máquina nos vamos deslizando con el movimiento de la superficie.
Si corres en la cinta al final vas a hacer un movimiento mecánico, no tienes que estar pendiente del entorno y tener cuidado con el suelo por si te caes. Al final lo que sucede es que desconectas y dejas de prestar atención a lo que estás haciendo y te pones a pensar en otra cosa, dejando que tu cuerpo siga el ritmo que marca la máquina, pero tú estando muy lejos de ahí.
Si hay un factor que influye y mucho a la hora de hacer deporte al aire libre es precisamente la climatología. Si llueve o hace mal tiempo eso te acaba echando para atrás, mientras que en tu casa o en el gimnasio no padecerás este aspecto y podrás seguir con tu ejercicio sin que nada te afecte.
Hay una premisa que se debe tener muy en cuenta a la hora de responder esta pregunta. Esta máquina fue creada por deportistas de élites para los días que no se pudiera entrenar al aire libre se pudiera hacer en casa y seguir con el entrenamiento planeado, por lo tanto, ¿es mejor correr en cinta? La respuesta es sí, pero teniendo en cuenta una serie de premisa a la hora de hacerlo y son las siguientes:
En principio la cinta no requiere el esfuerzo que requiere hacerlo en la calle ya que no presenta la dificultad de los desniveles, pero para esto hay una solución. Debes incluir variaciones en la inclinación cuando corras en la cinta para que esto se asemeje lo máximo posible a si lo hicieras al aire libre. Lo más recomendable es que alteres un grado o dos o incluso durante el entrenamiento lo puedes ir variando para que experimentes los cambios.
El desplazamiento que hace la cinta ayuda a seguir el ritmo mecánico de la carrera por lo que no tienes que tirar tanto de tu cuerpo. Por este motivo, para que las fuerzas se igualen y sea igual de exigente tendrás que incrementar un poco la velocidad con resto a correr por la calle para que los resultados sean los mismos.
Al final si haces deporte al aire libre te permitirá ir variando las rutas y no siempre será lo mismo. Sin embargo, en la cinta esto no pasará por lo que para combatir este aspecto deberás ir introduciendo diferentes variantes para que no tengas esa sensación de aburrimiento que te acabe casando. Una buena forma de hacerlo es con el incremento de la inclinación que hemos comentado antes o variar la intensidad. Si te vas poniendo tus propios retos día a día hará que te motives a superarlo.