Francia sufre un susto, pero golea a Australia (4-1)

Francia se llevó el primer partido del Mundial de Qatar 2022 ante Australia (). La vigente campeona empezó revalidando el título con algún que otro susto y se encontró en los primeros minutos con el gol del rival. Fueron los errores defensivos de los australianos los que propiciaron la remontada de los franceses con los goles de Rabiot y Giroud.

Los franceses comenzaron con la energía que tenía Mbappé en el ataque, pero se encontraron en los primeros minutos con una defensa muy solvente. Deschamps colocó a Rabiot y Tchouaméni como únicos centrocampistas con las ayudas de Griezmann para sacar el balón y ahí estuvo el primer error.

Los australianos se valieron de la superioridad en el centro del campo para presionar y robar en la salida. Estaban haciendo las cosas bien y consiguieron su premio. Leckie metió un centro fuerte al segundo palo por lo bajo que aprovechó Goodwin llegando en segunda línea para hacer el 0-1 en el 9. Australia comenzaba dando la sorpresa y Francia se tenía que reponer.

Australia, su peor enemigo

Tras el gol, a los galos les costó reaccionar y apenas llegan situaciones para poder generar superioridad. Fueron dos errores de Australia los que provocó que los franceses pudieran dar la vuelta al marcador antes del descanso.

Un córner fue el origen del empate. La segunda jugada favoreció a la actual campeona. Theo Hernández, que había salido por su hermano Lucas tras lesionarse en la jugada del tanto australiano, puso un centro milimétrico que remató a Rabiot de cabeza para hacer el 1-1.

El 2-1 llegó tras una pérdida en la salida de balón del combinado australiano. Mbappé recuperó, sirvió par Rabiot y este dio el pase de la muerte para Giroud, supliendo al lesionado Benzema, que no falló para consumar la remontada.

Tras esto, Australia se vino abajo y los espacios que al principio no encontraba Francia los tenía constantemente. A pesar de eso, justo antes del descanso, los australianos tuvieron de nuevo una oportunidad para hacer el empate tras un remate de Irvine al palo.

Tras el descanso, el equipo de Deschamps se mostró muy cómodo sobre el terreno de juego. Tocaba y tocaba hasta que llegaban las ocasiones y antes de que se produjera el tercero tuvieron varias para ampliar el marcador, pero no sería hasta el 68 cuando lo hicieron. Centro de Dembélé que Mbappé remató de cabeza e hizo el 3-1.

Francia estaba desatada y Australia ya no tenía piernas para tapar tantos huecos. Mbappé desde la banda izquierda no paraba de percutir y en una de las carreras metió un centro para que Giroud de nuevo rematara de cabeza y hacer el 4-1 definitivo. El saco de goles hacían olvidar las dudas del comienzo del partido y el susto del gol australiano.