Los pilotos de MotoGP exigen su cuerpo al máximo durante los fines de semana de competición. Aunque muchas personas pueden pensar que solo pueden lesionarse en caídas, lo cierto es que los niveles de estrés a los que son sometidos a lomos de las motos, y las posturas que deben adoptar al pilotar, también pueden derivar en afecciones musculares de diversos tipos.
Las situaciones extremas a las que se exponen los pilotos, con velocidades superiores a más de 340 kilómetros por hora, dan pie a lesiones de todo tipo. Aunque los pilotos han demostrado que están hechos de otra pasta y se recuperan a una mayor rapidez de fracturas o lesiones, adaptándose para que las dolencias no les impidan subir a la moto en la medida de lo posible. También es cierto que cuentan con tecnologías médicas, como cámaras hiperbáricas, que ayudan en el proceso de recuperación. La reglamentación, eso sí, impide correr a un piloto hasta que hayan pasado al menos 72 horas de la operación.
Estas son las lesiones más comunes en pilotos de la categoría MotoGP y de motociclismo en general.
La postura que utilizan los pilotos durante prolongadas horas, totalmente encorvados para combatir el viento, acarrean en intensos dolores de espalda. Lo suelen ejercitar de forma regular con sus fisioterapeutas y ejercicios de estiramientos, pero en algunos casos se han llegado a dar incluso citalgias, un dolor de espalda que afecta a la zona baja y afecta al nervio ciático.
Otra lesión frecuente en pilotos de MotoGP es el conocido como síndrome compartimental, producido por una sobrecarga tensionar alta que afecta a la fascia muscular de antebrazos, lo que incide en dolores en el músculo, nervio y vasos sanguíneos. Una afección que hay que tratar ya que puede tener consecuencias graves e incluso tener que precisar de tratamiento quirúrgico. Los movimientos tensionales que deben hacer sobre las motos provocan estas dolorosas lesiones.
A pesar de ser una lesión propia del mundo del tenis, como su propio nombre indica, los pilotos también pueden sufrir epicondilitis o codo de tenista debido a los movimientos repetitivos que realizan con los brazos al embragar o desembragar. Esto genera una gran tensión localizada en los tendones del hueso del codo. También deben tratar este tipo de dolencias para evitar pasar por el quirófano.
Las caídas de los motoristas suelen ser los motivos de las lesiones más dolorosas y duraderas, alejadas de las mencionadas, provocadas por la reiteración de movimientos. A pesar de los monos de protección que llevan, los pilotos no están exentos de fuertes abrasiones en su cuerpo cuando caen de lleno sobre el asfalto, siendo arrastrados unos metros por la inercia. Aunque entre su entrenamiento se encuentra el saber caer en un accidente, son daños colaterales imposibles de evitar.
Lógicamente, las lesiones más habituales en las aparatosas caídas de los pilotos de MotoGP son fracturas óseas en piernas, brazos o manos. Aunque se amortigüe el impacto, la mayoría de las afecciones de este tipo son prácticamente inevitables debido a la velocidad que alcanzan los pilotos. En ocasiones también pueden darse traumatismos en el pecho e incluso cerebrales.