Saltan las alarmas en la caravana del Rally Dakar. Un coche de asistencia explotaba antes de comenzar la competición. El conductor de vehículo está gravemente herido en el hospital. En un principio desde la autoridades locales se informó de un accidente aislado, pero desde Francia apuntan e investigan a que se trate de un atentado terrorista.
La Fiscalía Nacional Antiterrorista indicó en un comunicado que ha abierto una investigación preliminar por "tentativa de asesinatos en relación con una organización terrorista".
El vehículo afectado estaba ocupado por otros cinco franceses. Las pesquisas están en manos de la Dirección General de la Seguridad Interior (DGSI, los servicios secretos).
La organización de la prueba, ASO, indicó en un comunicado recogido por el diario Le Monde que el piloto resultó herido en la pierna y tuvo que ser operado en Arabia Saudí.
Ese mismo día, el Ministerio francés de Exteriores instó a sus nacionales en ese país a la "vigilancia máxima" y dio a entender que la hipótesis de un acto criminal no estaba descartada, además de recordar que "la amenaza terrorista persiste en Arabia Saudí".
El Ministerio del Interior saudí, por su parte, calificó lo sucedido de "accidente" y no contempló ninguna sospecha sobre un posible "origen criminal" de la explosión, según señaló Le Monde en su web.
El director del rally, David Castera, había precisado en la cadena France 4 que el coche afectado era un vehículo de apoyo del equipo francés Sodicars, y que la deflagración se produjo en el momento en que iba a hacerse las distintas comprobaciones técnicas antes de la carrera.