Fernando Alonso ya viste de verde. El piloto asturiano se ha subido por primera vez al Aston Martin cumpliendo así la hoja de ruta que tiene estipulada. En una jornada donde los tiempos son lo de menos, el bicampeón del mundo está cogiendo el 'feeling' al que será su monoplaza, al menos, los próximos dos años.
El ya expiloto de Alpine se ha enfundado en un mono totalmente negro con un casco de colores cebra y se ha subido al Aston Martin que hasta este domingo tenía a Sebastian Vettel como dueño. El monoplaza, exento de publicidad al igual que el casco y el mono de Fernando Alonso, ha llamado a todos la atención.
Aston Martin es la sexta escudería de Fernando Alonso en la Fórmula 1, y quién sabe si será el equipo que le lleve a conquistar su tercer título mundial. En la escudería británica quieren empezar a trabajar en la temporada 2023 cuanto antes. Un detalle a tener en cuenta es que Pedro De la Rosa, embajador del equipo, está siguiendo desde Abu Dabi todos los pasos que da tanto el equipo como Fernando Alonso para ayudar a mejorar en todo lo que sea posible.
Cabe recordar que tras esta jornada de tests, Fernando Alonso viajará hasta las inmediaciones de Silverstone para entrar por primera vez a la fábrica de Aston Martin y empezar a conocer a los encargados de desarrollar el monoplaza de la próxima temporada. Tras unos días compartiendo conocimientos y desarrollando aspectos del coche, Fernando Alonso pondrá rumbo a unas merecidas vacaciones antes de volver a la fábrica con los ojos puestos en 2023, donde no parte como aspirante al título pero donde sí espera dar un paso importante con respecto al rendimiento que ofrecía su Alpine.