El fin de semana de Carlos Sainz ha sido uno de los mejores que se le han visto en la temporada. El piloto madrileño se lució en la carrera al sprint y, a pesar de sancionar con cinco puestos, en la carrera del domingo volvió a dar muestras de su talento.
Después dos abandonos, en Japón y Estados Unidos, y un quinto puesto en México que sabía a poco, el piloto de Ferrari ha recuperado sensaciones en Interlagos. El viernes, el piloto madrileño clasificó en la quinta posición, tras una Q3 que no dió segundos intentos después de que la lluvia llegará con más fuerza después una bandera roja provocada por George Russell.
Sin embargo, Sainz se lució en la carrera al sprint. En ésta escaló hasta la segunda posición adelantando a Kevin Magnussen, Max Verstappen y a un Lando Norris que llevaba días enfermo. Además, supo mantener a raya a un Lewis Hamilton que venía con mucha velocidad y que terminó a tan solo medio segundo del madrileño.
Sin embargo, el piloto de Ferrari estaba visiblemente decepcionado, pues tendría que sancionar cinco puestos de cara a la carrera del domingo por montar un nuevo motor de combustión tradicional.
"Mañana saldré al ataque. No tengo nada que perder. Sí es verdad que es la historia de toda la temporada: un fin de semana que voy bien, que estoy delante, penalizo y ya va a costar mañana”, confesó en la jornada del sábado.
El madrileño salió por tanto desde la séptima posición intentando atacar a Lando Norris desde el principio, tal y como dijo que haría. Pero el día no empezó demasiado bien para el de Ferrari, pues tuvo problemas de sobrecalentamiento de los frenos en la salida y un ‘tear-off’ atascado en los pedales le obligó a parar antes de lo planeado.
Esta parada anticipada le obligó a pasar por boxes hasta tres veces, una estrategia más lenta, pero que resultó ser la adecuada gracias a un Virtual Safety Car, que le ayudó a perder menos tiempo en su última parada.
“Creo que en general ha sido una buena carrera. Hemos tenido problemas en la salida con los frenos, que han cogido fuego. Hemos tenido que parar pronto y entonces hemos tenido que optar por tres paradas, que no era la opción óptima por la degradación”, ha explicado el ‘55’.
En la relanzada del coche de seguridad logró dar caza a Sergio Pérez y gracias a ello escaló hasta la tercera posición, en la que se mantuvo hasta el final de la carrera, por detrás de unos intocables Mercedes.
“He podido tirar a muerte para ir a por Checo. Hemos podido atacar a Checo y es un buen podio. Después de empezar 7º, creo que podemos estar contentos con ello y la pena es que los Mercedes fueran tan rápidos. Pero enhorabuena a George”, ha añadido para cerrar.