Mike Tyson fue uno de los invitados de lujo del último combate que protagonizaron Deontay Wilder contra Tyson Fury. 'Iron' Mike bancó al 'Gipsy King', y estuvo acompañado por otros púgiles que marcaron una de las mejores generaciones de boxeo de la historia: Lennox Lewis y Evander Holyfield.
El combate por el cinturón de la WBC reunió en el MGM Grand Arena de Las Vegas a un montón de estrellas internacionales. Pero a pesar de la buena compañía y del gran entretenimiento que estaban presenciando, un fan de Mike Tyson le hizo perder los nervios.
Un hombre con un sombrero vaquero se acercó, con el móvil en la mano, al 'Hombre Más Malo del Planeta'. En el momento que el hombre trataba de hacerse la foto, Tyson le empujó y le recriminó la acción.
Tyson estaba de camino al frente del ring y no le gustó que se interpusieran en su camino con una foto sin consentimiento. Y si a Mike Tyson no le gusta, mal rollo.
Mike Tyson arropó a Tyson Fury porque él mismo fue el que le inspiró a ponerse los guantes de boxeo desde pequeño. De hecho, el padre de Fury, John Fury, también boxeador, le puso el nombre de Tyson por 'Iron' Mike para convertirlo un luchador.
Tyson Fury fue un bebé prematuro que no llegó a pesar 1 Kg cuando nació. Los doctores aseguraban que iba a tener pocas probabilidades para sobrevivir, pero su padre tenía otros planes.
"Les dije que Dios lo estaba menospreciando. Dije, 'él estará bien. Será un campeón mundial de dos metros y 120 kilos del peso pesado'. Y lo llamé Tyson, por Mike Tyson.", explicaba su padre en una entrevista con BBC Sport.
John Fury, que podía coger a su hijo con la palma de su mano, trabajó las piernas y los brazos de Tyson Fury desde el primer día para que saliese adelante.
"Recuerdo que estaba acostado bocarriba y con los puños en alto. Cuando pienso en dónde ha estado y dónde ha llegado, han sucedido cosas extraordinarias".