Positivo por coronavirus. Es la última mala noticia que ha recibido Sergio Ramos en este gafado año 2021 para él. El capitán del Real Madrid comenzó mal el año con una indisposición estomacal después de celebrar la Nochevieja en Sevilla con su familia y familiares más cercanos. Ramos no pudo comenzar el nuevo año sobre el césped contra el Celta de Vigo.
Además el arranque del año no era baladí para el camero. El defensa lo hizo como agente libre tras no llegar a un acuerdo de renovación con el Real Madrid. El club se mantiene en su oferta de una temporada más pero con reducción salarial. Ramos insiste en que se ha ganado con su trayectoria de blanco un último esfuerzo económico al que no llega el club por la pandemia del coronavirus.
Ramos ha pasado más tiempo en la enfermería que sobre el césped en lo que llevamos de año. El primer contratiempo importante llegó en la previa del partido ante el Huesca en el mes de febrero. El sevillano no entró y encendió las alarmas. Horas después el club anunciaba que su capitán había pasado por el quirófano para “resolver una lesión en el menisco interno de su rodilla izquierda que le estaba impidiendo jugar con el equipo desde la semifinal de la Supercopa, disputada el pasado 12 de enero”.
El camero se machacó para volver cuanto antes dentro y fuera de las instalaciones de Valdebebas y consiguió llegar a la llamada de Luis Enrique. España le convocó para los partidos de clasificación del Mundial de Catar 2022. Pero tras salir en el minuto 85 ante Kosovo para batir un nuevo record con La Roja cayó de nuevo lesionado.
Esta vez con una “lesión muscular en el gemelo interno de la pierna izquierda". Ramos volvía ser baja por un periodo aproximado de un mes con el Real Madrid jugándose la Champions ante el Liverpool y La Liga ante el Barcelona.
Ramos, como es su costumbre, se tomó la lesión como un nuevo reto para volver en plenitud pero justo en el periodo final de recuperación le ha llegado una nueva mala noticia. En el control periódico que el Real Madrid realiza a sus jugadores el capitán ha dado positivo por Covid-19.
El sevillano tendrá ahora que luchar contra su lesión de gemelo y lo hará apartado del grupo por el coronavirus. Pero eso no le impide mirar de frente al futuro. Ramos quiere ser importante en el doblete blanco (Liga y Champions), acordar con firma su deseo de seguir en el Real Madrid y jugar Eurocopa y Juegos Olímpicos de Tokio con España.
Todos estos objetivos pasan por recuperarse al cien por cien y ganar la batalla al coronavirus. Ramos emprende días de lucha en soledad pero le sobra carácter para ganar una y otra vez. El camero pasa un tramo de bajón pero no lo duden volverá. Y por la puerta grande.