Takefusa Kubo era uno de los jugadores más pretendidos en el mercado de verano. El japonés hizo una gran temporada en el Mallorca el curso pasado y muchos equipos de España y del extranjero se interesaron por su cesión. El Real Madrid y Kubo acordaron que el Villarreal era una buena salida, pero el jugador no está contando con minutos en el conjunto de Emery, y ahora hay preocupación por su escasa participación.
El Villarreal se interesó mucho en conseguir la cesión de Kubo para esta temporada, y fue el propio Unai Emery el gran valedor de su llegada. El japonés pensó que el ‘submarino amarillo’ era el lugar ideal para seguir creciendo como futbolista tras su paso por el Mallorca, pero hasta ahora no está teniendo muchos minutos.
En cinco jornadas de Liga, el Villarreal ha ganado dos, ha empatado dos y perdió por goleada en el Camp Nou. Kubo ha jugado en los cinco encuentros, pero en los cinco ha salido desde el banquillo y en total suma 55 minutos. Un bagaje muy escaso y muy inferior a lo que tenía pensado tanto el jugador como el Real Madrid.
El equipo blanco está preocupado por la evolución que pueda tener su jugador esta temporada en el Villarreal si sigue sin tener minutos. El Real Madrid no quiere que Kubo se quede casi sin jugar o cuente con minutos residuales en los partidos, y de seguir así y si el jugador así lo pide, podría intentar cambiar el destino de su cesión en el mercado de invierno
Emery, por el momento, ha contado con jugadores como Moi Gómez o Samuel Chukwueze por delante del japonés pero aún queda mucha liga. La temporada pasada, Kubo no jugó de titular hasta la quinta jornada de Liga y no se afianzó en el equipo titular hasta la 12. A partir de ahí, el japonés ya fue indiscutible con Vicente Gómez y deslumbró a muchos equipos.
Kubo recibió muchas ofertas este verano, entre las que estaba una del Bayern Múnich, pero eligió salir rumbo al Villarreal porque consideraba que era un equipo que se le podía ajustar en el juego. El japonés va a seguir trabajando para hacerse un hueco con Emery, pero de seguir así se podrían plantear cambiar de equipo en invierno, como ya ha hecho el Real Madrid otras temporadas con las cesiones de Lunin, Vallejo o De Frutos.