Entorno a la hora antes del partido de Supercopa del Real Madrid contra el Athletic salía a la luz la alineación oficial de los blancos en donde estaba presente el capitán. Las alarmas saltaban cuando en el camero se retiraba del calentamiento y le sustituía Nacho.
Minutos más tardes se conocía que se había recuperado de las molestias que había sufrido y saltaba al terreno de juego de inicio. Aguantó todo el partido y como es habitual cada vez que el Madrid está en apuros en los últimos minutos subió a rematar los balones colgados para intentar empatar, tuvo sus opciones, pero no esta vez no estuvo acertado.
Ahora conocemos el alcance real de esas molestias. No era una nimiedad como al principio parecía. Sergio Ramos se infiltró en la rodilla izquierda para poder jugar. Las últimas imágenes del defensa demuestran que hay dolencia y se le veía cojear al bajarse del autobús.
En los últimos meses ya ha tenido varios problemas en esta rodilla y por eso los blancos prescindirá de él partido de Copa ante el Alcoyano y se verá si juega ante el Alavés. Quieren cuidarlo y no arriesgar a pesar de que los números sin él son preocupantes. Con su presencia en el césped, el Real Madrid gana el 60% de los partidos, sin él pierde el 60%. Cifras que hacen temblar a Zidane y a los merengues.
El capitán blanco ya ha tenido 3 lesiones en los últimos cuatro meses y prefieren tenerlo entre algodones de cara a fechas importantes. Lo bueno que tiene es que el esfuerzo y los tiempos de recuperación con él se reducen y apelan a esta buena genética para que la zaga blanca puede contar pronto con él.
Estas lesiones que están lastrando al jugador en los últimos tiempos no viene nada bien a la hora de negociar sobre su futuro en el Real Madrid. Todo sigue en el aire y paralizado. Veíamos las imágenes del saludo entre el capitán y Florentino Pérez y se palpaba la frialdad. No hay posturas cercanas hasta ahora.
El Madrid no se mueve de la oferta que le han planteado y desde el entorno del camero aseguran que todavía no se ha producido esta por lo que está claro que no está habiendo entendimiento ni a la hora de ofrecer la oferta de renovación.