Pjanic ha sido la última salida que se ha producido en el FC Barcelona. El bosnio ha puesto rumbo a la liga turca para jugar en el Besiktas durante un año a modo de cesión. Ya instalado en su nueva ciudad ha aprovechado para hablar sobre su situación en el Barça en los últimos tiempos en una entrevista concedida a MARCA y el peor parado ha sido Koeman.
"Hoy mismo, hoy día, no sé todavía qué quería exactamente, no intentó explicarme cosas, o encontrar una solución. Era yo quien iba a preguntarle qué quería de mí, de esta posición, qué estoy haciendo mal o bien para saber, por adaptarme más rápido dentro de equipo, para ser útil... En una temporada al final necesitas 17-18 jugadores para ganar títulos. Pero para él no había problemas en mi juego, no me daba respuestas", dijo el jugador bosnio.
"Había muchas personas dentro que ninguno entendía lo que pasaba. Era así, vale. Salió esta oportunidad (Besiktas), la quería escuchar. Quiero jugar, estoy seguro de mi calidad, sé muy bien lo que puedo aportar a un equipo, pero claro, necesitas la confianza, el diálogo, que te digan las cosas a la cara, que nunca me las ha dicho. necesitas la confianza, el diálogo, que te digan las cosas a la cara, que nunca me las ha dicho.Hubiera preferido que me dijeran las cosas directamente, pero es así. Ha sido una forma de comunicar muy extraña, es la primera vez que vivo esto. Sinceramente, no sé lo qué pasó. No quería responsabilidad, no quería confrontación, porque seguramente no sabía gestionar eso".
Además, ha señalado que los principios no fueron fáciles y ya ahí empezó a ver que las cosas no iban bien con el entrenador del Barça. "Llego dos semanas después que el resto, empiezo a entrenar poco a poco, solo, para prepararme con el preparador físico, e ir entrando con los compañeros. Y nada, pasan dos, tres, cuatro, siete, 10 días y el míster nunca vino para hablar un poco de lo que pensaba de la temporada, de mí, para hablar simplemente, para introducirme dentro de un equipo, como hace el resto. Y nada, pasa el tiempo, empiezo a jugar uno sí y uno no, uno sí y uno no. Estaba muy bien, jugando mis partidos, pero claro, quería más, para dar más por el equipo. Soy una persona que siempre quiere el máximo y dar más".
"Hay un punto que voy jugando menos, la cosa se va complicando. Y cuando juegas es difícil física y mentalmente estar bien, porque te está matando la confianza, porque no tienes comunicación con él. Era muy extraño, porque no sé, un entrenador es quien dice quién juega y quién no, pero hay maneras diferentes para hacer las cosas. He luchado hasta el final, he sido profesional con los chicos, siempre trabajando para estar bien, también para ellos, para que se prepararan bien para los partidos. Sabía que si el míster se quedaba ahí tenía que encontrar una solución".
El ya jugador del Besiktas se ha atrevido a asegurar que no es el único que ha pasado por una situación así refiriéndose a los casos como los de Umtiti, Riqui Puig o Junior Firpo. "Es una situación muy difícil de aceptar, pero voy a luchar en los entrenos, cuando pueda entrenar fuerte lo haré, para mí, porque esta persona ahí no va a cambiar nunca. Él, el entrenador, la cosa más grave, creo que es una falta de respeto sobre el grupo, era esto. Los que no juegan después de los partidos hacen un entreno fuerte, bueno, mientras que los titulares recuperan para el próximo partido. Estos que no juegan, la cosa grave para mí es que este entrenador no estaba nunca ahí para ver la actitud de esos futbolistas que no juegan. Es la primera vez que he visto esto. ¿Cómo un jugador puede motivarse o decir 'estoy aquí'? ¿Cómo puedo cambiar las cosas si él no viene a ver cómo entreno o qué actitud tengo?".
"Un jugador lo ha hecho mal en el partido, voy a ver el de esa posición cómo se comporta al día siguiente. Esto es una cosa, una de las más brutas (feas) que he visto, para mí es una muy grande falta de respeto. Estábamos luchando, no estaba fácil para los que no jugábamos, y él no ha estado ahí en toda la temporada. Estoy diciendo eso porque lo he visto así. Ahora es pasado, he encontrado una solución para jugar y luchar, estoy muy feliz".