Messi acaba contrato en pocos meses y no está dispuesto a aceptar ninguna propuesta de Josep María Bartomeu para reducirse el sueldo de 50 millones de euros que cobra en el Barcelona. El argentino no va a alargar su vinculación con el club azulgrana con la actual Junta Directiva, y no tiene margen para espaciar su salario en más años de contrato. No habrá acuerdo con él, pese a que algunos capitanes, como Piqué, ya han firmado su renovación.
El Barcelona sigue inmerso en una profunda crisis institucional. El delantero culé no quiere aceptar ninguna propuesta para rebajarse el sueldo que llegue procedente de la directiva actual, según publica el Diario Ara. Messi no va a llegar a un acuerdo con Bartomeu, tras todo lo que sucedió este verano, y no le pondrá las cosas fáciles para rebajar su salario.
La intención del club azulgrana es que los jugadores vayan ‘recuperando’ el sueldo que tenían firmado con varios años más de contrato. La Junta Directiva quiere que ahora acepten cobrar menos para recibirlo en unos años más adelante. Ter Stegen a un lado porque ha negociado su ampliación durante varios meses, Lenglet, De Jong y Piqué han sido los tres jugadores que han aceptado la propuesta del club.
Algo que no está dispuesto a hacer Messi porque su relación con Bartomeu es nula. El argentino señaló que empezaba la temporada y quería centrarse en lo deportivo, pero no le va a poner las cosas fáciles al presidente del club culé. Messi está dispuesto a aceptar una rebaja de salario, pero no procedente de Bartomeu. El delantero cobra 50 millones y tiene una prima a final de temporada, pero tiene claro que no llegará a un acuerdo con el presidente azulgrana.
Bartomeu salió en rueda de prensa para hablar sobre la moción de censura y el referéndum que tiene que hacer el club. El presidente culé está esperando una respuesta de la Generalitat para pronunciarse sobre su futuro si finalmente hay voto de los socios. Y no solo habló de la moción de censura, también lo hizo sobre el desgaste que sufrió en verano porque no dejó salir a Messi.
"Durante aquellas semanas tuve que defender que lo mejor para el Barça era la continuidad del mejor jugador del mundo y de la historia del fútbol. Leo Messi tenía contrato en vigor, ya que había caducado la opción de la rescisión unilateral. Y lo más importante: la prioridad deportiva era poner en marcha un nuevo ciclo con Messi en el equipo", explicó el presidente del Barcelona.
"Voy defender los intereses del club, aceptando la erosión que significaba negarse a la decisión de Messi de irse a uno de nuestros 'rivales", apuntó Bartomeu sobre la intención del argentino de dejar el club este verano al mandar el burofax.