El Barça no pasa por su mejor época a pesar de la llegada de Xavi Hernández y un nuevo empate ante el Osasuna haría que las tensionen entre el club y los aficionados se dispararan. Joan Laporta lo vivió en primera persona ya que a la salida de El Sadar tuvo un enfrentamiento con unos hinchas en las inmediaciones del estadio.
El presidente culé no se tomó muy bien algunas de las reclamaciones que hicieron los fans y no dudó en encararse a ellos. La seguridad allí presente pronto puso paz y distancia para que la cosa no fuera a más.
Este tipo de suceso viene tras el empate del Barcelona ante el Osasuna y con la reciente eliminación de los culés en Champions. La situación ya se está volviendo crónica en la institución culé. La llegada de Xavi Hernández y su efecto ha durado poco y los resultados no llegan.
La llegada del nuevo entrenador puso una aliciente de ilusión que poco a poco se había perdido con el Ronald Koeman. Después de varios partidos esta está empezando a decaer y los aficionados se empiezan a impacientar. Xavi ya ha avisado que esa es la "realidad" que no dista mucho del "esto es lo que hay" que pronunció el neerlandés.