El nuevo Real Madrid de Carlo Ancelotti ya ha echado a rodar oficialmente con un amistoso ante el Rangers. Anteriormente habían jugado dos partidillos en Valdebebas contra el Fuenlabrada y el Rayo, pero este encuentro ya entraba dentro de la agenda blanca de este verano.
En la primera prueba, el conjunto blanco dejó alguna que otra duda en defensa que solventó Lunin en la primera parte en donde marcó Rodrygo, pero el Rangers quería ir a por el partido y en el segundo tiempo empató. Nacho fue expulsado por el 75 y fue cuando los escoceses lo aprovecharon para hacer el tanto definitivo de la victoria para ellos (2-1). Ancelotti comenzó con derrota en esta segunda andadura, algo muy distinto a lo que hizo en la primer en donde venció en su primer encuentro con un contundente 0-6 ante el Bournemouth.
El italiano no ha tenido a todos los jugadores disponibles ya que algunos de ellos se han incorporado recientemente por sus compromisos internacionales o en el caso de otros todavía no lo han hecho. El motivo de Benzema es distinto ya que dio positivo en Covid antes de incorporarse a los entrenamientos.
Con todo esto presente, Carletto ha tenido que confeccionar un once con el que ir probando estilo de cara a la temporada, aunque en teoría los canteranos no partirían de inicio. De los nombres más conocidos o veteranos solo Isco y Nacho repetían con respecto a la primera alineación que sacó en su debut en el 2013.
Ante el Rangers Ancelotti salió en portería con Lunin, defensa de cuatro para Odriozola, Nacho, Chust y Marcelo; el medio campo para Antonio Blanco, Odegaard e Isco y en la delantera Lucas Vázquez, Jovic y Rodrygo. No se vio al recién llegado Alaba ni a los titularísimos en el medio campo como son Modric, Kroos y Casemiro.
En el 2013, el entrenador italiano debutó en amistoso ante el Bournemouth y ahí las caras eran muy distintas a la de la actualidad. Bajo palos estaba Diego López y en la zaga Pepe, Nacho, Coentrao y Carvajal. En el centro del campo lo ocupaban Modric, Isco y Khedira y arriba Cristiano Ronaldo, Benzema y Özil. Solo dos sobreviven o al menos con respecto al primer partido.
En el caso del croata o el delantero francés son excepcionales e irán teniendo participación, uno cuando tenga más tiempo de entrenamiento y el otro cuando se recupere del Coronavirus.