Cristiano Ronaldo está en el punto de mira en Italia. La Juventus consiguió este fin de semana la victoria ante el Genoa pero la imagen del partido no serán los goles. El portugués terminó el encuentro totalmente fuera de sí, cabizbajo e incluso lanzando al suelo la camiseta bianconera.
El delantero no está en su mejor momento y se quedó otro partido sin marcar. Este enfado de Cristiano se trasladó al vestuario donde fue a más. Según publica ‘La Gazzetta dello Sport’, el luso la tomó a puñetazos con una de las paredes de la caseta justo al entrar en la ducha.
Posteriormente, se vistió a toda velocidad y se fue del vestuario sin dirigir ni una palabra a sus compañeros. Pirlo, entrenador de la Juve, tuvo que salir en su defensa: “No habrá multas ni nada de eso. El partido estaba terminado y estar nerviosos es algo normal. Le puede pasar a cualquier jugador".
Cristiano suma esta temporada 32 goles en 37 partidos con la Juventus pero la tempranera eliminación de la Champions ante el Oporto ha hundido al conjunto turinés. Los últimos desplantes del portugués están cansando a una afición –y a una directiva- que piden su salida.
A todo esto hay que añadir que el delantero está como loco por regresar al Real Madrid. Cristiano está dispuesto a poner todo de su parte para conseguir un regreso al Santiago Bernabéu. Pero por las oficinas blancas ni está ni estará una operación para su vuelta. Desde el Real Madrid dan por cerrada su etapa en el club.